Benedicto XVI denunció, hace más de medio año, que el hombre tiene la "horrorosa posibilidad de ser inhumano" sin dejar de ser persona. El caso de Eluana, la joven italiana, lo ha puesto en evidencia.
El Papa dijo en aquella ocasión que el hombre, cuando intenta liberarse de su alma, tiene la "horrorosa posibilidad" de perder su humanidad sin dejar de ser persona
Benedicto XVI afirmó también que cuando al hombre le falta el alma le falta todo y señaló que desde que se liberó del alma -agregó el Papa- no tuvo más miramientos ni humanidad. "Actuaba sin escrúpulos, ocupándose sólo del dinero y del éxito. El hombre no contaba más, él mismo no tenía ya alma", la realidad de la vida nos demuestra "de manera impresionante, como detrás de la fachada del éxito se esconde muchas veces una existencia vacía".
Es obvio que el ser humano no puede arrojar el alma, desde el momento que ella le convierte en persona. El hombre permanece siempre como ser humano, pero tiene la horrorosa posibilidad de ser inhumano, de seguir siendo persona vendiendo y perdiendo al mismo tiempo su propia humanidad.
José Morales Martín
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario