El presidente nacional de exportadores de hortalizas cultiva tomates en Almería

LAEDICION.NET.-Jorge Brotons es también el máximo responsable de Bonnysa Agroalimentaria, que posee invernaderos en Huércal-Overa, con 95 hectáreas • Ha comenzado a sembrar tomates a comienzos del mes de abril
Con una filosofía de trabajo basada en la calidad y el control directo de toda la cadena de producción, desde el cultivo, pasando por la selección, el manipulado, el envasado y la comercialización, Bonnysa Agroalimentaria tiene en el tomate su producto estrella.

Con esta premisa, es lógico pensar que produce esta hortaliza en las principales zonas tomateras españolas. Así es, y cuenta con instalaciones en Andalucía, Canarias, Valencia y Murcia, las cuatro comunidades autónomas que absorben casi el 90% de la producción de tomate de España.

La empresa, presidida por el máximo responsable de la Federación Española de Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex), Jorgen Brotons, cultiva un total de 95 hectáreas de tomates en Huércal-Overa.

Estas instalaciones se suman a las 295 hectáreas que Bonnysa posee en Alicante, 180 en Tenerife y 155 en Murcia, lo que arroja una cifra de 725 hectáreas de invernaderos.

La plantación se realiza en diferentes épocas del año según la zona, lo que garantiza un suministro más estable a los mercados. En el municipio del levante almeriense, Brotons asegura que abril es el mes clave para comenzar la plantación. Bonnysa cultiva un amplio abanico de variedades en tomate: ensalada, canario, raf, rama, pera, cherri, cherri pera y valenciano.

Los tomates que la empresa, de origen canario, prepara en Almería pasan por los almacenes de manipulado de Los Llanos-Mutxamel (Alicante), de 30.000 metros cuadrados, donde cuenta con 57.000 metros cuadrados en cámaras, con una capacidad para 2.000 toneladas y un régimen de envasado de 100 toneladas cada hora.

El volumen medio de producción de Bonnysa es de alrededor de 100.000 toneladas de tomate al año. Aunque no es la única hortaliza que cultiva la firma tinerfeña. También se dedica a preparar plátano, banana, piña, plátano macho, yuca, kiwi, frutas tropicales y productos de cuarta gama, entre ellos, granada natural pelada o tomate natural rallado, ambos listos para consumir.

Bonnysa Agroalimentaria está presente en las principales ferias hortofrutícolas internacionales, tales como Fruit Logística, donde su presidente también aprovechó para duplicar sus tareas. Además de reunirse con clientes y hacer contactos para ampliar su cartera de clientes, Jorge Brotons impulsó la futura feria de frutas y hortalizas que se celebrará en Madrid a principios de noviembre, Fruit Attraction.

Este certamen madrileño, que contará con 10.000 metros cuadrados y se celebra por primera vez en la capital española, se promocionó en la feria berlinesa con un estand propio y contó con Brotons como uno de sus más firmes defensores.

Bonnysa Agroalimentaria es una de las principales firmas productoras y exportadoras de tomate de Europa, con presencia en el mercado nacional y en casi todos los países europeos.

El secreto de su éxito radica en su apuesta por el control de todo el proceso productivo: desde la selección de las semillas hasta la distribución a los centros logísticos de cada cliente. La dirección técnica y el control de los cultivos se desarrolla mediante el establecimiento de normas comunes de producción de obligado cumplimiento para los asociados. No en vano, la empresa hortofrutícola cuenta con el certificado UNE-EN ISO 9001 de Aenor, la Marca N para tomates y plátanos y la conformidad con los requisitos técnicos Aenor-BRC para empresas suministradoras de productos agroalimentarios.

Bonnysa Agroalimentaria cuenta con una plantilla de alrededor de 3.000 personas. Además, tiene un elevado concepto de la Responsabilidad Social Corporativa. A través de la Fundación Antonio Bonny y Sebastiana Manrique de Lara (nombre del fundador y de su esposa), realiza una amplia labor benéfico-docente, mediante la concesión de becas, ayudas económicas y a través de un colegio de educación infantil en El Campello (Alicante), en el que reciben educación, manutención y transporte gratuito unos 200 hijos de trabajadores de la empresa.