Eugenio Gonzálvez- Senador Del PP De Almería
EL pasado miércoles, el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, Lorenzo Amor, denunció que la crisis ha obligado a cesar su actividad a 300.000 autónomos afectados por la situación de asfixia financiera, ausencia de liquidez y morosidad, tanto pública como privada, derivada de una crisis que, en su opinión, puede llevar la tasa de paro a niveles del 17% en 2009. Durante su comparecencia en la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso, Lorenzo Amor insistió en que en el último año 666.595 autónomos se han dado de baja del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos de la Seguridad Social, una cifra impresionante que, a mi juicio, refleja con absoluta nitidez la inoperatividad de un Gobierno desbordado por la magnitud de la crisis.
A esta terrible circunstancia, se une la pésima noticia de que el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios y Profesionales Autónomos, Pedro Mezquida, comunicó a los medios de comunicación que la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso de los Diputados cerró sus comparecencias sin contar con ellos, a pesar de tratarse de una organización ampliamente conocida por su intensa labor de representación del colectivo autónomo. Según las palabras del propio Mezquida, "los sindicatos y las organizaciones afines al Gobierno están olvidando al sector y no están dando soluciones para el colectivo de trabajadores autónomos". Sin embargo, a pesar de la preocupante incertidumbre, el Gobierno de Zapatero, en vez de asumir responsabilidades y ofrecer una hoja de ruta para salir del atolladero, lo que ha hecho es criticar a la oposición, pues la portavoz socialista de Economía en el Congreso de los Diputados, Inmaculada Rodríguez-Piñero, ha acusado a mis compañeros de utilizar a los autónomos en su beneficio, lo que viene a demostrar que, en el fondo, para el Partido Socialista la gente no es más que un instrumento que cualquiera puede usar y tirar. Por todo cuanto acontece, esta semana he creído oportuno centrar mi tarea parlamentaria en la realización de una batería de preguntas escritas al Gobierno para comprobar la situación real en la que se encuentran los autónomos de nuestra provincia, labor que he complementado con la presentación de tres preguntas orales en que le solicitaba información sobre cuándo entrará en vigor la prestación por cese involuntario de actividad, derecho reconocido en el Estatuto del Trabajo Autónomo, si se plantea establecer políticas concretas tendentes a estimular su financiación para que puedan mantener la actividad y, finalmente, si el Ejecutivo está estudiando rebajar su presión fiscal. Porque para el Partido Popular, los autónomos sí existen.
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