sábado, 1 de mayo de 2010

El francés Le Monde tacha de malo e insípido al tomate almeriense

Un reportaje destaca que los productos de Almería son baratos por las penosas condiciones del agricultor y comenta cómo se consigue este cultivo para todo el año
LAEDICION.NET.-El bueno, el malo y el insípido', así titulaba el periodista francés Pierre Daum un reportaje este pasado mes en Le Monde diplomatique cuyo antetítulo decía 'El alto precio de los tomates baratos europeos'. El periódico galo, en su edición inglesa, cita que el trabajo ilegal y las penosas condiciones de vida son las causas de que los europeos puedan comer tomate todo el año. Asimismo, indica que cuando dejan de venderse los tomates franceses, llegan los españoles de los que dice ser: duros, harinosos e insípidos.

Los franceses, para poder tener tomates toda la temporada, han encontrado la solución en la provisión de este cultivo a partir de Almería. De esta provincia, de la que recuerdan el spaghetti western de Sergio Leone, dicen que hoy se estima que 110.000 personas trabajan en la agricultura y que de ellos unos 90.000 son extranjeros y a su vez de estos entre 20 y 40.000 son ilegales. "Un agricultor en Francia gana 55,40 euros en una jornada de ocho horas, lo que supone para el empleador 104 euros incluyendo contribuciones. En Almería los agricultores ganan entre 32 y 37 euros al día, a pesar de que el neto mínimo es de 44,40 euros. Y los empleadores no tienen que pagar ni extras ni contribuciones, ya que ellos normalmente no los declaran", dice el periodista en su información.

Pierre Daum añade que los agricultores viven hacinados y conmemora los hechos ocurridos en febrero del año 2000 en El Ejido cuando un marroquí asesinó a una mujer española en esta localidad, si bien no desarrolla con exactitud lo acontecido.

El periodista habla con Isidoro Martínez de Casur, cooperativa almeriense que suministra a los supermercados Asda en el Reino Unido, Carrefour en Francia, Lidl y Edeka en Alemania y Magnifruits en Países Bajos. De su conversación resalta que los productos son lavados y secados para eliminar residuos que puedan llegar al consumidor pero insiste en palabras de Martínez, "la mayoría de productos peligrosos permanecen ocultos debajo de la piel".

Además, Daum dice en su reportaje que si un consumidor piensa que puede evitar comprar tomates españoles en tiendas francesas está equivocado. Una de las soluciones que cita es comprar tomates a Marruecos, pero indica: "Son cultivados exactamente igual -refiriéndose a la misma forma que los almerienses".

Finalmente, el reportaje de Le Monde concluye, de acuerdo a la redacción del periodista, que la mejor opción es seguir el consejo del chef francés Jacques Pourcel, con dos estrellas Michelín a través de su restaurante Jardin des Sens en Montpellier quien dice: "Yo sólo uso tomates en verano" .

No hay comentarios: