La industria farmacéutica paraliza su colaboración con la Junta

La continuidad del acuerdo respaldado por Griñán en febrero queda en el aire

LAEDICION.NET.-El Gobierno ha cruzado las líneas rojas en sus relaciones con la industria farmacéutica. Y eso va a tener repercusiones en Andalucía. La deducción impuesta a los laboratorios del 7,5% de sus ventas al Sistema Nacional de Salud en un importante grupo de medicamentos ha dado al traste con el agreement de marzo de 2009 entre el Gobierno de la nación y Farmaindustria. Ese acuerdo se basaba en el equilibrio, ahora roto, de dos elementos: manteniemiento del empleo en el sector y compromiso con el tejido asistencial e investigador del país a cambio de un escenario de crecimiento de la factura farmacéutica de la sanidad pública razonado y razonable.

El decreto del pasado mes de marzo sobre racionalización del gasto farmacéutico levantó ampollas y las últimas medidas del Gobierno, aun cuando han sido reformuladas en parte, han acabado con esa buena relación. Lo sabe Moncloa, lo sabe el sector (que lidera la I+D privada en España) y lo sabe la Junta de Andalucía, que va a tener que gestionar su parte alícuota de consecuencias. Todos estaban avisados, pero pocos se leyeron la letra pequeña: entre las derivaciones de ese acuerdo está el Programa+i, de colaboración con las comunidades autónomas, pensado para apoyar iniciativas a la carta de los gobiernos regionales por 180 millones entre 2009 y 2013. Farmaindustria dijo el martes que las medidas del Gobierno obligan a paralizar esa colaboración con las autonomías.

La Junta firmó su convenio con Farmaindustria relativo a este programa el pasado cinco de febrero y su rúbrica, en Málaga, contó con el respaldo del presidente de Farmaindustria, Jesús Acebillo, y del presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán. Ocho millones de euros comprometidos y susceptibles de ser ampliados en futuros acuerdos. Acuerdos que, si no cambia radicalmente la situación, no se van a reeditar. Ahí entran el Instituto de Investigación Sanitaria de Málaga, otro en Granada, la red de biobancos y el plan de investigación clínica en primaria. La Junta cuenta con la ejecución del compromiso correspondiente a la anualidad de 2009. Lo demás, congelado y sin negociar, queda en el aire.