Ortega Cano sabe que ha tenido un accidente pero no sus consecuencias

La familia de Carlos Parra emite un comunicado en el que señala que José triplicaba la tasa de alcohol permitida
¿Cuántas veces hemos oído o dicho aquello de "¡qué feliz es la ignorancia!"?

DANIELLA MONTENEGRO
Efectivamente, esta frase popular refleja a la perfección la realidad del drama en torno al trágico accidente de tráfico de José Ortega Cano, hace un mes.

Aquella fatídica noche el torero colisionaba contra otro vehículo y provocaba la muerte en el acto de Carlos Parra. El diestro, gravemente herido, comenzaría una odisea de supervivencia en la que durante tres semanas ha estado más próximo a la muerte que a la recuperación. Mientras tanto, rumores, enfrentamientos de familias y todo tipo de escándalos "animaban" el ambiente en torno a un accidente que no ha provocado más que desgracias. Un accidente que, al parecer, podría haberse evitado ya que la causa principal ahora parece ser el alcohol.

Ahora que, por fin, el viudo de Rocío Jurado se estabilizaba y comenzaba a mejorar un nuevo dato empaña esa buena noticia: la tasa que José presentaba de alcohol en sangre en el momento del accidente triplicaba la máxima permitida legalmente.

El torero se recupera lenta y favorablemente sin saber, todavía, nada de lo que está sucediendo en realidad. Fuentes próximas a él señalan que José no pregunta mucho. Quizás por miedo a saber. Quizás porque sabe la tranquilidad que muchas veces proporciona la ignorancia. El caso es que dicen que aunque el diestro no plantea muchas preguntas, sí ha querido saber cuánto tiempo llevaba en el hospital. También apuntan que él sabe "lo que ha ocurrido": que ha sufrido un accidente, aunque lo que seguramente desconoce son las consecuencias del siniestro. ¿Y sus causas?, ¿qué recordará Ortega Cano de lo sucedido?
El nuevo comunicado de la familia de Carlos Parra
Ayer la familia de Carlos Parra, a través de su abogado, emitió un comunicado a los medios confirmando que habían recibido los resultados de las analíticas del famoso torero y señalaban que el nivel de alcohol en sangre que figuraban en esos resultados es de 1,26 mientras que las pruebas de Carlos resultaron negativas.

Por ello, creen que "existen datos suficientes para determinar una presunta conducción desordenada y anormal, susceptible de acusación penal por varios presuntos delitos en que su momento procesal oportuno se concretarán". El documento explica que aún "no se han aportado las diligencias judiciales, el esperado informe técnico" pero entienden "que existen datos suficientes para determinar una presunta conducción desordenada y anormal, susceptible de acusación penal por varios presuntos delitos en que su momento procesal oportuno se concretarán".

El comunicado finaliza con un buen deseo de los abogados firmantes y los herederos de Carlos Parra que, en palabras textuales "desean la pronta recuperación del señor Ortega Cano".

Todos compartimos ese deseo: la pronta recuperación de José Ortega Cano. Cuando esa recuperación se produzca, la dura realidad volverá a azotar al diestro ya que, tal y como han señalado varias fuentes "en cuanto sus condiciones físicas y psíquicas lo permitan José deberá declarar", con lo que comenzará otra dura batalla para José que, tras los datos oficiales, podría enfrentarse, incluso, a una condena de cárcel de entre dos y cuatro años.