El niño de la Duquesa

DANIELLA MONTENEGRO.-LAEDICION.NET.-No contento con las suculentas subvenciones que recibe la Casa de Alba desde Europa, además de “otras” por las muchas hectáreas que posee y a las cuales no se les exige “productividad”, ahora resulta que el PER sigue siendo innecesario para quien lo necesita para sobrevivir. Este aburrido jinete, única profesión que se le conoce, además de vivir de uno de los patrimonios más grandes de Europa, se permite dudar del trabajo de los andaluces y carga contra los jornaleros, los mismos que en ocasiones han tomado tierras no productivas de su propiedad. Si a esto le sumamos su preferencia a resolver las discrepancias con espada o puños en vez de tanta demanda judicial y su declarada cercanía con el insultador profesional Durán y Lérida, podremos entender que, viniendo de alguien que no ha sudado recogiendo aceitunas o deambulando como los temporeros andaluces, sus opiniones merecen el más absoluto desprecio.