Tres hoteles pendientes de la justicia del ladrillo

Los proyectos para la construcción de complejos hoteleros y residenciales de El Algarrobico, Campillo de Gata y La Fabriquilla esperan sentencia definitiva • Los promotores cuentan con licencia y se sienten "víctimas" de las administraciones
LAEDICION.NET.-:/ Redacción.-Atrapados por la administración y en manos de la justicia. Después de conseguir las correspondientes licencias municipales, elaborar proyectos urbanísticos y realizar inversiones millonarias, las tres infraestructuras turísticas que se habían ideado para cubrir el vacío existente en el parque natural de Cabo de Gata-Níjar (el hotel más grande apenas cuenta con medio centenar de habitaciones) están paralizadas a la espera de que se dicte una sentencia definitiva que les permita culminar las obras o percibir indemnizaciones por los daños y perjuicios ocasionados, principalmente por los errores de las administraciones.

El hotel de El Algarrobico, todo un símbolo de la destrucción del litoral para los conservacionistas y ecologistas, es el más avanzado, fue paralizado cuando estaba al 95% de su ejecución, y después de sentencias contundentes, con carácter firme e irrevocable, por invadir la zona de servidumbre, su futuro sigue siendo toda una incógnita. La promotora, Azata del Sol, promueve una solución alternativa al derribo, mientras que Gobierno y Junta dejaron la negociación en la que se planteó incluso la expropiación del hotel, para esperar una decisión judicial que les ahorraría el elevado coste en tiempos de crisis.

El proyecto para construir más de 300 casas y un hotel de lujo en La Fabriquilla lleva más de 28 años en los tribunales. Aurelio Nogués logró licencia municipal en 1982 y desde entonces todo han sido trabas por parte de las administraciones. De hecho, ha presentado querellas por delitos de prevaricación contra Junta y Ayuntamiento por paralizar una actuación avalada en 1997 por el Tribunal Supremo. También ha recurrido a la justicia, Círculo Agroambiental para denunciar la actuación de la Junta, de dos de sus ex delegados provinciales, al paralizar la obra del hotel de lujo, de unas 50 habitaciones, durante el verano de 2010. De hecho, se pensó en el arquitecto portugués Álvaro Siza, galardonado con el premio Pritzker, para diseñar la infraestructura de 3.000 metros cuadrados.

Además de los tres hoteles, los ecologistas han logrado frenar en los tribunales la construcción en una veintena de zonas que en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) aparecían como áreas urbanizables. Se trata de núcleos urbanos del parque como Aguamarga, Las Negras, Rodalquilar, la Isleta del Moro, San José o el Cabo de Gata.