Los hijos mayores de Rocío Dúrcal demandan a su padre

La idílica familia de la cantante Rocío Dúrcal se rompió tras su muerte. Su marido Junior decidió escribir unas polémicas memorias en las que confesaba haber sido infiel a la artista, lo que llevó a sus hijos mayores, Carmen y Antonio, a retirarle la palabra. Junior pasó solo las navidades pero decía a la prensa que confiaba en una pronta reconciliación. Lo que él no sabía es que las cosas iban a empeorar ya que ahora sus primogénitos han decidido denunciarle al no llegar a un acuerdo en el reparto de la herencia de Dúrcal.
Tras dos años de negociaciones infructuosas, Antonio y Carmen han decidido reclamar la parte legítima de la herencia que les pertenece, presentando esta misma semana, a través de sus abogados David Rocasolano Llaser y Natalia Padilla Herrero, una demanda en el Juzgado de Primera Instancia de Collado Villalva, explica '¡Hola!' en una exclusiva. Al parecer, la intérprete de 'Me gustas mucho' no sólo no revisó testamento sino que dio por bueno el que había firmado en 1992, exactamente 14 años antes de su muerte, y en él quedó escrito cómo le gustaría que se repartiera su patrimonio, joyas, trajes (a partes iguales entre sus dos hijas) y sus objetos personales. Aún así, unos meses antes de fallecer, la cantante donaría, inesperadamente, algunos de los bienes a sus tres hijos --entre ellos un piso en la Castellana de 250 metros-- dándoles a éstos el derecho de plena propiedad.
La revista explica que en el primer aniversario de la muerte de Marieta, toda la familia llegó a un acuerdo para repartirse según la ley las propiedades de la artista, que ascienden a dos millones de euros. Así, Junior tomó su parte estipulada (valorada en unos 900.000 euros) y aceptó entregar a sus hijos lo que les corresponde, una novena parte indivisa y pleno dominio de la misma, es decir, una cantidad que rondaría los 350.000 euros. Sin embargo, lo que parecía haber terminado de manera amistosa no había hecho más que empezar, ya que hace un tiempo sus hijos se enteraron de que Rocío Dúrcal tenía más propiedades que no fueron incluidas en el testamento ni en la escritura de la partición hereditaria, que elevaría la fortuna a cuatro millones de euros.
De este modo, los hijos pidieron a
su padre una reconsideración de la situación. Carmen y Antonio reclamaron a Junior la parte que les pertenece como herederos forzosos pero el ex componente de 'Los Brincos' considera que esos bienes son exclusivamente suyos. Ante esta situación, ambos decidieron interponer una denuncia contra su padre, primero instándole a llegar a un acuerdo entre sus abogados y después, al o haber reacción alguna, han presentado la demanda. En cuanto a su tercera hija, Shaila, la publicación indica que estaría del lado de sus hermanos aunque no se ha unido a ellos de forma 'oficial'. La joven está de acuerdo en lo que están reclamando Carmen y Antonio, sin embargo ha preferido no llevar a su padre a los tribunales.
Este contencioso judicial viene a agravar la ya maltrecha situación familiar, que no estaba en su mejor momento. De hecho, aunque parece que Shaila mantiene una buena relación son su progenitor, sus allegados aseguran que cuando viaja a España desde México, en donde reside, se queda en casa de su hermana y visita a su padre a menudo, algo que demuestra que entre ellos el trato no es el mismo que antes de la muerte de Marieta.