La ex nuera de Junior y Marieta explicó que las malas relaciones entre los hermanos y entre padre e hijos vienen de mucho más atrás que la infidelidad contada por el músico en su biografía.
A punto de cumplirse el tercer aniversario de la muerte de Rocío Durcal afloran cada vez más noticias sobre las pésimas relaciones familiares. Edurne González, ex mujer de Antonio Morales hijo, llegó a DEC dispuesta a tirar de la manta. Y no se cortó ni un pelo para acabar con la visión que se tenía hasta ahora de la familia "buena" de Rocío Durcal frente a la familia "mala" de Rocío Jurado. En ambas familias, como en todas las del mundo, hay muchos trapos sucios y algunos afloraron anoche.
Durante la entrevista con Jaime Cantizano y sus colaboradores, Edurne aseguró que no le había sorprendido la demanda a Junior por parte de sus hijos Carmen y Antonio por el reparto de la herencia de Rocío Durcal, asunto del que informó El Semanal Digital. "Antonio es capaz de eso y de mucho más", afirmó Edurne, la mujer que perdió la custodia de sus gemelos y que le pasa cada mes la pensión de manutención para los niños.
Críticas descarnadas al padre
Según Edurne, los "malos rollos" vienen de muy atrás, de cuando "Marieta estaba muy malita". "Antonio y su padre estuvieron un año y medio sin hablarse", aseguró. Tampoco era tan maravilloso el comportamiento de Carmen con su madre. "La acompañaba a las revisiones pero no estaba nunca en el día a día, ni en las comidas del fin de semana", comentó. Y añadió: "Sólo pido que mis hijos nunca digan de mi lo que le he oído decir a Carmen y Antonio de su padre".
Según la nuera de Marieta, para Carmen, su padre era "un egoísta" y "estaba muerto", pese a que Junior les dio mucho dinero a ambos cuando lo pedian. "Los dos hermanos viven por encima de sus posibilidades y no les gusta trabajar. Yo oí a Carmen decir que no quería para nada ser actriz, que lo que quería era quedarse en su casa", agregó.
Las "cajas de Alí Babá"
En cuanto al tema de los problemas de Junior con el alcohol durante la última etapa de la enfermedad de Marieta, Edurne dijo que "todos sabían lo que pasaba" pero no se ocuparon de él. A la pregunta de si los hijos no se fían del padre y temen que se pueda gastar el dinero de la herencia, Edurne dijo que el músico "nunca dilapidaría el dinero, además es muy ordenado en todas sus cosas de facturas y papeleos".
Sobre las "cajas de Alí Babá" que Jesús Mariñas mencionó antes de comenzar la entrevista y en las que el periodista cree que Junior y Marieta guardaban "sus tesoros" en Estados Unidos, González dijo desconocer que existan.
Después de reconocer que lo de la infidelidad de Junior a Marieta pudo ser un gancho para vender más libros y admitir que no denunció a su marido Antonio por malos tratos para no hacer daño a su suegra, González insistió en que la matriarca siempre fue conciliadora y quiso dar una imagen de familia sana y feliz. "Creo que ya no habrá más sorpresas", concluyó.
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