Pedrojota destapa la celeridad de Bono con Seseña

CORRUPCIÓN Y MAFIA Laedicion.net.-( redacción) Un mafioso pagó 700.000 euros al alcalde socialista que ayudó a El Pocero a crear una urbanización de 13.000 viviendas cuyo expediente fue agilizado por el presidente de Castilla-La Mancha.
Según el diario que dirige Pedrojota Ramírez hay un camino que va de Marbella a Seseña. El Mundo reveló este miércoles que dos empresas controladas por Gianni Montaldo, amigo de Juan Antonio Roca, pagaron más de 700.000 euros a José Luis Martín, el ex alcalde socialista que adjudicó al constructor Francisco Hernando, El Pocero, una urbanización de 13.000 viviendas. Montaldo está procesado por sobornos en la Operación Malaya y, según el juez Miguel Ángel Torres, vinculado a la mafia de Calabria.

Es una historia que emerge ahora en todos sus detalles. El ex alcalde socialista de Seseña, José Luis Martín, que antes de convertirse en primer edil era el taxista del pueblo y que en su puesto en el ayuntamiento cobraba 1.800 euros al mes, amasó una importante fortuna que él atribuyó a un golpe de suerte: cinco cupones de la ONCE premiados. Pero en realidad esta súbita riqueza se debía a unos sospechosos pagos de unos 700.000 euros que recibió entre diciembre del 2002 y octubre del 2003 a través de una empresa llamada Servicios y Desarrollos Culturales Norte, cuyo administrador único es el hijo del ex alcalde, Óscar Martín, y en la que el propio José Luis Martín y su esposa figuran como apoderados.

Sorprendente celeridad en los trámites

Las compañías pagadoras fueron Inverespaña Sema y Sur Inversiones Sema, domiciliadas en Estepona y apoderadas por Gianni Montaldo y su esposa, Tatiana Annetta Eugenia Triacca. Montaldo ha sido uno de los protagonistas de la Operación Malaya, por la que se encuentra procesado por haber entregado 540.000 euros a Roca para que éste favoreciese los intereses inmobiliarios de sus empresas. Además, los informes policiales afirman que se le relaciona con la mafia calabresa.

Hay que señalar que entre noviembre del 2002 y mayo del 2003 se tramitó, con sorprendente celeridad, la autorización para que el constructor Francisco Hernando, conocido como "El Pocero" erigiese su espectacular urbanización en Seseña, que iba a contar con 15.000 viviendas

Muchas de las numerosas facturas presentadas por Servicios y Desarrollos Culturales Norte están firmadas por el propio José Luis Martín, alguna de ellas en concepto de unos servicios inmobiliarios que no están entre los objetos sociales de la firma.

Se da la circunstancia, además, de que a pesar de que la empresa de Martín fue creada en el año 96 no había presentado ninguna facturación anterior al primer pago desde las compañías de Montaldo; del mismo modo, cuando terminaron las relaciones con éstas en 2003 la facturación se derrumbó: de los centenares de miles de euros en 2003 a sólo 6.000 en 2004.

Según la información de El Mundo, José Luis Martín ha asegurado al diario que no conoce a Montaldo y que no ha habido nada ilícito en su actuación. Además, ha expresado su malestar por la lentitud con la que está avanzando el proceso judicial por este caso en el que él es el único imputado.

Los oscuros cimientos de la obra de El Pocero

Para Pedrojota, toda esta información destapada debe servir para que la Administración extreme los controles en las operaciones urbanísticas. Y se pregunta, en el editorial de "Los oscuros cimientos de la obra de El Pocero", que si la opinión pública ha estado durante meses en vilo por cuatro trajes y un nebuloso delito de cohecho pasivo, "qué no habrá que decir de lo que se presenta como un cohecho de libro que acabó con la recalificación de 1,8 millones de metros cuadrados y la construcción de un monstruo de cemento para 40.000 personas sin ningún respeto a normas básicas".

Asegura el diario de Unidad Editorial que cuando el Ayuntamiento de Seseña aprobó el polémico plan en 2003 lo hizo sin una declaración de impacto ambiental y sin el informe de la Comisión Provincial de Urbanismo que debía valorar las necesidades de agua de la nueva ciudad. El Mundo apunta que "no sólo sorprende la condescendencia municipal ante una obra que cambiaba la faz de un pueblo de 14.000 habitantes" y señala que "la Administración autonómica, dirigida entonces por José Bono, tramitó el expediente con una celeridad cuando menos sospechosa".

En la actualidad, Francisco Hernando, "El Pocero", que se encargó de la edificación, indica El Mundo, ha abandonado la obra habiendo construido menos de la mitad de las viviendas comprometidas. El diario de Pedrojota señala que centenares de pisos han quedado sin vender y la urbanización de la zona sigue pendiente, lo que obliga al Ayuntamiento a tener que salir en auxilio de los nuevos vecinos, que ni siquiera pueden afrontar por sí solos los pagos para el mantenimiento del complejo residencial.

Para El Mundo, Seseña es el símbolo del declive de Francisco Hernando, "que ha visto en pocos meses cómo se frustraban otras de sus iniciativas como su empresa dedicada a los vuelos de lujo, su incursión en el motociclismo o sus intentos por construir en Guinea Ecuatorial". El diario que dirige Pedrojota insiste en que "las revelaciones de cómo se actuó en Seseña y las conexiones con Marbella deben llevar a la Justicia a investigar el fondo del asunto". "Su exasperante lentitud contrasta con la rapidez con la que se dieron los permisos", sentencia el diario.

Curiosamente "El Pocero" volvió a un primer plano -como destacó El Semanal Digital- con su oferta de traer a España a Julián Lago para que fuera atendido y evitar su muerte en Asunción. Posteriormente su avión se estropéo al prepararse para ese vuelo de Madrid a Asunción. Pero ni él ni su dircom, Alfredo Urdaci, quisieron añadir nuevos datos.