LAEDICION.NET.-:/ Redacción.-La compañía energética inició este
proyecto a comienzos de 2010, con una instalación de ensayos para el cultivo de
microalgas · Hace un año concluyó la ampliación · En total, invertirá 3,5
millones Endesa concluyó en diciembre del año pasado la construcción de la
ampliación, la denominada Fase II, de su planta piloto de captura de dióxido de
carbono con microalgas, instalada en los terrenos de su central térmica Litoral
de Almería. La compañía energética se encuentra ya ultimando la puesta en
marcha definitiva de este proyecto, para el que prevé invertir un total de 3,5
millones de euros. En concreto, se encuentra probando los reactores que
considera que más se ajustan a las necesidades de esta iniciativa.
El objetivo principal era probar nuevos tipos tanto de fotobiorreactores como de microalgas y desarrollar procesos de valorización de la biomasa obtenida como primer paso para demostrar la viabilidad técnico-económica de la planta. Esta segunda fase entró en operación a principios de 2012.
En esta segunda ampliación, que tiene una extensión aproximada de 1.000 metros cuadrados, se ensayan dos tecnologías de fotobiorreactores distintas de las que están en funcionamiento en la planta actual. Se trata de los raceways (o reactores abiertos) y los fotobiorreactores tubulares horizontales semi-cerrados.
Además, se investiga el desarrollo de microalgas genéticamente modificadas con objeto de probarlas posteriormente en las fases I y II de la planta piloto. Con ello se pretende demostrar que los resultados obtenidos en el laboratorio se pueden igualmente obtener a escala piloto o semi-industrial, operando durante seis meses en la planta con una o dos de las microalgas genéticamente modificadas más prometedoras, con gases reales de combustión y con agua de mar.
La modificación genética de las microalgas se acomete con dos objetivos: aumentar la producción de la biomasa algal, es decir, aumentar la concentración de microalgas en el cultivo y, por tanto, la capacidad de capturar dióxido de carbono, así como aumentar la producción de lípidos (materia prima para la producción de compuestos de alto contenido energético) que actualmente presentan las microalgas.
Para el desarrollo de estas actividades, financiadas por el programa Innpacto, promovido por el Ministerio de Ciencia e Innovación, Endesa cuenta con la colaboración de varios socios en el proyecto; se trata de Aitemin, la Universidad de Almería y Tecnalia.
El proyecto también contempla la realización de estudios de mercado de los productos obtenidos a partir de la biomasa algal, así como del aprovechamiento de la fracción proteica y de carbohidratos para productos de gran consumo u otros usos de interés.
Endesa comenzó su andadura en la tecnología de fijación de dióxido de carbono con microalgas en 2006 dentro del proyecto Cenit CO2, como resultado del cual se diseñó y construyó la fase I de la actual planta piloto de tecnología nacional, la más grande de Europa en su género.
Actualmente, la planta, ubicada en la Central Térmica Litoral de Almería, en Carboneras, propiedad de Endesa, está en fase de operación y cuenta con 12 calles de fotobiorreactores (planos verticales inclinados 60 grados en dirección norte-sur de tipo bolsa y abiertos). Con esta planta se están logrando los objetivos de conocer, desarrollar y optimizar la fijación de CO2 mediante el cultivo de microalgas y su rendimiento de producción, demostrando así la viabilidad técnico-económica como primer paso hacia la escalabilidad a nivel semi-industrial.
Las microalgas son microorganismos que pueden absorber el CO2 presente de la atmósfera o tomarlo directamente de los gases de combustión de centrales térmicas o industriales para transformarlo en lípidos, proteínas, carbohidratos, etc. España, y Almería no es una excepción, tiene unas de las condiciones climáticas más favorables para el crecimiento y cultivo de estos microorganismos.
El objetivo principal era probar nuevos tipos tanto de fotobiorreactores como de microalgas y desarrollar procesos de valorización de la biomasa obtenida como primer paso para demostrar la viabilidad técnico-económica de la planta. Esta segunda fase entró en operación a principios de 2012.
En esta segunda ampliación, que tiene una extensión aproximada de 1.000 metros cuadrados, se ensayan dos tecnologías de fotobiorreactores distintas de las que están en funcionamiento en la planta actual. Se trata de los raceways (o reactores abiertos) y los fotobiorreactores tubulares horizontales semi-cerrados.
Además, se investiga el desarrollo de microalgas genéticamente modificadas con objeto de probarlas posteriormente en las fases I y II de la planta piloto. Con ello se pretende demostrar que los resultados obtenidos en el laboratorio se pueden igualmente obtener a escala piloto o semi-industrial, operando durante seis meses en la planta con una o dos de las microalgas genéticamente modificadas más prometedoras, con gases reales de combustión y con agua de mar.
La modificación genética de las microalgas se acomete con dos objetivos: aumentar la producción de la biomasa algal, es decir, aumentar la concentración de microalgas en el cultivo y, por tanto, la capacidad de capturar dióxido de carbono, así como aumentar la producción de lípidos (materia prima para la producción de compuestos de alto contenido energético) que actualmente presentan las microalgas.
Para el desarrollo de estas actividades, financiadas por el programa Innpacto, promovido por el Ministerio de Ciencia e Innovación, Endesa cuenta con la colaboración de varios socios en el proyecto; se trata de Aitemin, la Universidad de Almería y Tecnalia.
El proyecto también contempla la realización de estudios de mercado de los productos obtenidos a partir de la biomasa algal, así como del aprovechamiento de la fracción proteica y de carbohidratos para productos de gran consumo u otros usos de interés.
Endesa comenzó su andadura en la tecnología de fijación de dióxido de carbono con microalgas en 2006 dentro del proyecto Cenit CO2, como resultado del cual se diseñó y construyó la fase I de la actual planta piloto de tecnología nacional, la más grande de Europa en su género.
Actualmente, la planta, ubicada en la Central Térmica Litoral de Almería, en Carboneras, propiedad de Endesa, está en fase de operación y cuenta con 12 calles de fotobiorreactores (planos verticales inclinados 60 grados en dirección norte-sur de tipo bolsa y abiertos). Con esta planta se están logrando los objetivos de conocer, desarrollar y optimizar la fijación de CO2 mediante el cultivo de microalgas y su rendimiento de producción, demostrando así la viabilidad técnico-económica como primer paso hacia la escalabilidad a nivel semi-industrial.
Las microalgas son microorganismos que pueden absorber el CO2 presente de la atmósfera o tomarlo directamente de los gases de combustión de centrales térmicas o industriales para transformarlo en lípidos, proteínas, carbohidratos, etc. España, y Almería no es una excepción, tiene unas de las condiciones climáticas más favorables para el crecimiento y cultivo de estos microorganismos.
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