Aznar afea a Rajoy sus políticas y no descarta volver

LAEDICION.NET.-José María Aznar, ha reaparecido la noche del martes en televisión para sacar los colores a Mariano Rajoy criticando su política económica, su política fiscal y su lucha contra el paro. Con frases como "es necesario bajar los impuestos porque el proceso de castigo que se le está aplicando a la clase media es demasiado fuerte", o "el Gobierno debe de actuar hoy mismo y hay que trazar unos objetivos nuevos", Aznar ha minusvalorado al actual presidente del Gobierno en una entrevista a tres bandas en Antena3 en la que ha dejado la puerta abierta a un posible regreso a la primera línea política.

La visita del expresidente a la cadena de Planeta ha cobrado una especial relevancia tras conocerse que su nombre se ha vinculado a la supuesta 'contabilidad B' del extesorero Bárcenas y que, según ha destapado hoy mismo el diario 'El País', la trama Gürtel pagó parte de la boda de Ana Aznar y Alejandro Agag en 2002. Sin embargo Aznar pasó de puntillas por algunas de las preguntas realizadas por la directora de informativos, Gloria Lomana, y los periodistas invitados, Paco Marhuenda ('La Razón') y Victoria Prego ('El Mundo').

Preguntado por los sobresueldos, Aznar lo ha negado rotundamente. "Sólo percibí la retribución como presidente. Ni devengué ni percibí ninguna otra percepción. Pagaba todos los años que estaba como presidente y pagué una renta durante mis años en La Moncloa". "No tengo dificultad en demostrar mis ingresos. Los únicos sobres que he conocido son los que entraban con fondos reservados en La Moncloa de la etapa del PSOE. Había costumbre de tener 300.000 pesetas de libre consumición diarias. Se reponían según se consumían. Eso se terminó el mismo día que yo llegué a Moncloa. No he conocido más sobres que esos. Las cuentas del PP enviadas al Tribunal de Cuentas, estoy convencido que son las cuentas correctas". Algo que no se corresponde con lo apuntado por el exdiputado popular Jaime Ignacio del Burgo quien asegura que Aznar aprobó varios de esos pagos.
En cuanto a los supuestos tratos recibidos por la trama Gürtel, que su mujer Ana Botella ha reconocido ser "un regalo de bodas" pero que nada tiene que ver con la trama corrupta, Aznar ha señalado que "es una mala información, cuyo origen está bastante localizado", para añadir que ese invitado al que se refiere era un "invitado personal por parte del novio a la boda del que no se conocían otras actividades, pero que es normal que los invitados hagan regalos".
"El Grupo Prisa", ha proseguido, "se distingue por su odio a mí, que intentó impedir que llegara al Gobierno y que gobernara. Primero publican que recibí retribuciones ilegales, lo cual es mentira. Luego dicen que ideé un sistema para pagar menos a Hacienda, lo cual es mentira. Luego, que se vulneró la Ley de Incompatibilidades, lo cual es mentira. Y esto lo dice ahora un medio que está casi en bancarrota, que ha vendido Cuatro a Berlusconi, un señor procesado". Lo paradójico es que el propio Silvio Berlusconi fue uno de los invitados estrella al enlace de su hija en El Escorial cuando ya pesaban sobre él diversas acusaciones delictivas.
Sorteados los dos escollos que se ciernen estos días sobre el expresidente del Gobierno se ha dedicado a aportar su particular visión de la situación que atraviesa España sin reparar en palos, más o menos disimulados, al actual gobierno presidido por Mariano Rajoy. Así el vallisoletano ha condenado la tibieza con la que el Ejecutivo responde a la aventura soberanista de Cataluña, y la parsimonia con la que se asiste a la "vulneración de los límites del Estado autonómico".
Entrados en política, José María Aznar ha ampliado los reproches hacia el Ejecutivo. En primer lugar señalando la necesidad de bajar los impuestos. "España necesita una profunda reforma fiscal. La destrucción de las clases medias es muy grave. Necesitamos recuperar las clases medias. El PP en 1998 hizo una reforma fiscal y bajó los impuestos", ha recordado. Algo similar ha sucedido al abordar el drama del paro para el que Aznar cree que deben tomarse más medidas. "Se lo dice una persona que heredó un país con 12 millones de trabajadores y que lo entregó con 18 millones", ha apuntado el exmandatario.
Cuestionado directamente por si se trataba de una reprimenda a Mariano Rajoy, Aznar ha asegurado que solo defiende lo que él haría. "Son mis criterios y mis ideas, y creo que entra en el mandato electoral recibido por el PP, y espero que sea aplicado. Se heredó una situación terrible para España, y también se heredó una gran mayoría, un partido muy disciplinado. Hay que trazar unos objetivos nuevos". Acto seguido ha añadido que un Gobierno tiene que actuar todos los días.
¿Significa eso que está defraudado por el Ejecutivo actual? "Me encuentro en una situación parecida a la de millones de votantes del PP. Me gustaría ver una acción de Gobierno muy definida por un proyecto político y unos objetivos históricos renovados", ha concluido.