Manuel, Oscar y Raúl Quijano desgranaron su último disco y
tocaron muchas de sus canciones más conocidas Aseguraron sentirse muy felices
de estar en tierras almerienses
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LAEDICION.NET.- Manolo, Óscar y Raúl, los hermanos
Quijano llegaron el sábado al Teatro Auditorio de Roquetas de Mar donde
hicieron un concierto con un repertorio centrado en los boleros, aunque no
faltaron otros temas como La Lola, Desde Brasil
y La Taberna del Buda.
Los acordes de Como siempre, Desengaño, Prometo
o Quiero que mi boca se desnude estuvieron presentes en una noche
mágica, donde el grupo se mostró muy bien en un Auditorio que aglutinó a unas
1.000 personas. El sonido impecable con un chelo de tierras leonesas llamado
Pelayo Tahoces que estuvo magistral.
Después de varios años de silencio, Café Quijano volvía a reunir a sus fieles
seguidores en un concierto con el más puro estilo Quijano. No hay que olvidar
que el grupo en el año 2002 dio 200 conciertos en una gira, batiendo todos los
récords y por supuesto su canción La Lola
fue número uno en varios países.
Con este bagaje era de esperar una formación más madura pero con un sonido que
incitara al baile.
Sobre un escenario que podría simular un estudio de cine, los hermanos Quijano
arrancaron su concierto con el tema Se que
vuelvo a volver mientras empezaba Manuel Quijano a ir explicando
situaciones y momentos vividos por los tres hermanos y sobre todo dando pie a
cada tema. Manuel Quijano dio las gracias al público por haber asistido al
concierto. "Para nosotros es una satisfacción volver a Roquetas de Mar,
donde siempre nos han dado mucho cariño".
"Os vamos a contar una serie de historias de amor. Son historias de amor
que son dramas. Queremos cantar y contaros esas historias de amor a través de
los boleros", dijo Manuel para entonar el tema Y, mientras tanto y continuar con Pienso
en ti despacio, otro de los temas de su nuevo disco.
"Hay amores que van mucho más allá de lo terrenal, hay algunos amores que
a pesar de no poder disfrutarlos se convierten en amores que marcan una
vida" comentó el mayor de los hermanos Quijano. A lo largo del concierto
volvió a recordar como en la Navidad de 2002 estando en su casa de León
decidieron parar y descansar. "Hemos estado descansando hasta la navidad
de 2011, que fue cuando decidimos grabar un disco de boleros, algo que
llevábamos mucho tiempo con ganas de hacer", comentó.
Luego sonó un tema que tuvo un gran éxito y que ellos disfrutaban mucho
cantándola con Joaquín Sabina. Se trataba de Notienescorazón.
El público con este tema se puso en pie y entonces disfrutó a lo grande con uno
de los temas de más conocidos del grupo. Luego llegarían Nunca supe, Desengaño y Éramos distintos, tres
boleros del nuevo trabajo.
Un repertorio de 17 canciones para dos horas de concierto. Y es que Manuel
Quijano con sus explicaciones fue dando entrada a cada una de las canciones. En
todo momento estuvo hablando de amor, siempre de amor. Entre bolero y bolero,
Café Quijano cantaba La Lola,
probablemente su mayor éxito en estos años. Este tema hizo que el público se
pusiera en pie. Manuel Quijano recordó a su madre cuando cantó La Lola, aparte de ser el nombre del pub que
regenta su padre en León.
Para concluir el concierto, Café Quijano hicieron dos temas de boleros como Que será de mi y Quiero que mi boca se desnude
para cerrar con otro tema también muy popular como Desde Brasil. En ese momento, Manuel Quijano recordó que tuvo
una novia que era de Mojácar. Tras salir por unos instantes del escenario,
regresaron para hacer un bis de cuatro temas. Concretamente cantaron tres temas
del nuevo disco, Como siempre, No, no soy yo y
Prometo. Evidentemente tenia que sonar La
Taberna del Buda.
La historia de este grupo partía de la taberna que los hermanos Quijano
regentan junto a su padre en León, La Lola,
que dio nombre a su composición más exitosa hasta la fecha y en la que tocaban
a menudo hasta que grabaron una maqueta y todo se aceleró súbitamente, Café Quijano (1998). Luego llegarían La extraordinaria paradoja del Sonido Quijano
(1999), La taberna de Buda (2001) y Qué grande es esto del amor (2003).
Un ritmo frenético de conciertos en gira en poco tiempo a los que el trío puso
freno de manera tajante. En 2004 se despidieron pero siempre con la idea de
volver. Su público los echaba de menos. En 2011 Café Quijano sorprendían con el
anuncio de un nuevo álbum para 2012: Orígenes:
El bolero
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