Apuesta local para abrir las calles a las personas con discapacidad

El Ayuntamiento realiza una inversión anual de 250.000 euros para evitar las barreras arquitectónicas, que ya se han incluido en el próximo presupuesto
La instalación de semáforos acústicos, el rebaje de aceras o la colocación de enlosado especial para las esquinas de las calles tiene un menor coste económico que el social que, además, conllevaría el mantenimiento de las calles con barreras arquitectónicas en las obsoletas urbanizaciones. Conscientes de esta situación, desde el Ayuntamiento de Almería se ha iniciado con la inversión de 250.000 euros la eliminación de todos los elementos que dificulten en tránsito por parte de las personas con discapacidad por las calles de la ciudad.

Las tareas están integradas dentro de las labores que se realizan a través del área de Servicios Urbanos de la capital, aunque los responsables municipales resaltan que existen otras muchas partidas que están incluidas, con la misma finalidad, dentro de los proyectos globales de urbanización de los barrios que han sido objeto de una actuación integral.

Cortijo Grande, San Luis, Los Ángeles, Ciudad Jardín, las 104 Viviendas, las calles semipeatonalizadas del centro, Retamar, el Paseo de la Caridad o los bulevares de El Alquián y La Cañada ya cuentan con las medidas ajustadas a las necesidades de todos los potenciales usuarios. También se ha intervenido en el acerado de las calles Cara, Anzuelo, Lance, Plaza Anzuelo y Boya del barrio de Pescadería. A ello se sumarán las próximas actuaciones previstas en El Zapillo, Diezmo, Los Molinos o la céntrica calle de Méndez Núñez. "Una ciudad más accesible e integradora, especialmente para los colectivos más débiles", así define el alcalde de la capital, Luis Rogelio Rodríguez, a la ciudad de Almería tras su llegada al Ayuntamiento de la capital.

La voluntad municipal es la de "sentar las bases sobre el modelo de movilidad que la ciudad quería para su futuro", por lo que además se incidirá en los edificios municipales. A la remodelación de la Casa Consistorial en la Plaza Vieja que suma la recién ocupada Farmacia municipal que se establece como la entrada a la Casa de Socorro. Además, el alcalde se ha comprometido a estudiar un incremento de las medidas para las viviendas de protección oficial destinadas a personas con discapacidad que se realicen a través de la empresa local Almería XXI.

La modernización de la flota de los autobuses públicos o la habilitación en la playa de El Zapillo una zona de baño con sillas anfibias y monitores son otras medidas que se han realizado. En el ámbito de la movilidad rodada, también se ha iniciado el estudio de las plazas de aparcamiento con discapacidad. Además, durante la pasada Corporación, con la edil Rebeca Gómez al frente del entonces área de Recursos Humanos, inició la convocatoria de puestos municipales especialmente destinados a las personas afectadas por discapacidades.

Todos los barrios recibirán de forma paulatina actuaciones, según el compromiso municipal, que permita la erradicación de las barreras que imposibilitan la normal movilidad peatonal de los discapacitados por las calles de la ciudad, ampliando el ancho del existente, de acuerdo con las Normas Técnicas de Accesibilidad y Reducción de Barreras Arquitectónicas de la ciudad.