domingo, 15 de febrero de 2009

Zapatero critica al Banco de España por intentar recortar el estado social

El comisario Joaquín Almunia se opone a medidas proteccionistas
«Adelgazar el estado de bienestar no reactivará la economía». Así de tajante se mostró ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Sus palabras fueron un reproche a la actitud del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordoñez, quien el miércoles afirmó que el coste del despido y el sistema de protección de desempleo dañan el mercado laboral e impiden la contratación de trabajadores y la creación de empresas. Para el jefe del Ejecutivo, las recetas de Fernández ordoñez forman parte del «catálogo neoconservador».
Al mercado de trabajo español también se refirió el comisario europeo de Asuntos Económicos, el socialista Joaquín Almunia. Ante los micrófonos de RNE y sin defender medidas contundentes, abogó por abrir «inmediatamente» un debate «sereno y equilibrado» que mejore las perspectivas laborales. «Es obvio que el mercado no funciona bien», dijo a la vez que expuso su preocupación por «toda medida proteccionista» que es preciso rechazar. No obstante, señaló que la situación del empleo no se puede entender sin analizar el sistema productivo, en el que ha habido un exceso de actividad ligada a la construcción, que ha introducido temporalidad y precariedad laboral.
Rodríguez Zapatero aprovechó la presentación de los objetivos que España piensa cumplir en su próxima presidencia de la Unión Europea (UE) (primer semestre de 2010) para responder al gobernador. Hizo hincapié en que un páis con derechos laborales, en el que los salarios son cada vez mejores y en el que los trabajadores están protegidos socialmente es sinónimo de economía avanzada y competitiva y de un potencial de creación de riqueza. El camino para recuperar el empleo no es el abaratamiento del despido ni la desregulación del mercado, remarcó.
Rechazo
El titular de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho y el portavoz económico del PP, Cristóbal Motoro, se sumaron a las críticas al Banco de España.
Los pronunciamientos de Zapatero, Almunia, Corbacho y Montoro se produjeron por la mañana, y, a última hora de la tarde la polémica se avivó. El director general del Servicio de Estudios del Banco, José Luis Malo de Molina, reiteró que los sistemas de contratación y negociación colectiva adolecen de rigideces, obstaculizan la flexibilidad salarial y obligan a que los ajustes se produzcan a través de las colocaciones. Insistió en la necesidad de reformas que eviten que los mecanismos de protección para algunos colectivos «generen fuertes pérdidas de puestos de trabajo y reduzcan los incentivos a la contratación» y reclamó la aplicación de medidas transitorias que «maximicen» el empleo.

No hay comentarios: