Luis Rogelio anuncia recortes presupuestarios en áreas como Cultura, Salud y Consumo, Medio Ambiente o Participación Ciudadana • El ahorro del gasto corriente rebajará impuestos
REDACCIÓN.-D.M.-Con el mes de septiembre ha dado comienzo el nuevo curso político con una agenda, la del alcalde de Almería, apretada de proyectos de gran trascendencia para el futuro de la capital como el soterramiento de las vías del tren. Pero más allá de esta actuación, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador y su equipo se enfrentan a otro asunto que cobra más relevancia de la que de por sí posee dada la crisis económica y su repercusión en el bolsillo del ciudadano. Es la elaboración del presupuesto del Ayuntamiento de la capital para el próximo año y el alcalde ya ha lanzado una advertencia a su equipo: "Algunos concejales van a empezar a llorar".
Es la forma, más que directa, con la que Rodríguez-Comendador ha anunciado los recortes presupuestarios con los que trabajarán las distintas áreas municipales a lo largo de 2010. Lola de Haro, responsable de Cultura, Rafaela Abad, la edil de Salud y Consumo, y Pilar Ortega, que gestiona el área de Participación Ciudadana, son las concejales que -empleando la misma expresión del regidor-, van a llorar por el considerable recorte del dinero con el que contarán el próximo año. Ya se resintieron con el presupuesto en curso, pero Rodríguez-Comendador ha hecho hincapié en reducir todo lo posible gasto corriente, pese los brotes verdes que puedieran aparecer en el periodo de crisis.
Todas las concejalías antes citadas están bajo el control del Partido Popular, pero el socio de Gobierno del Grupo Independiente tampoco se escapa a la medida decretada. Si ya para 2009 le tocó el turno al área de Urbanismo, con una drástica bajada en el presupuesto de Juan Megino, le corresponde a Esteban Rodríguez, como responsable de la Concejalía de Medio Ambiente y Mantenimiento, apretarse el cinturón en este nuevo curso presupuestario, según el alcalde. "Vamos a aguantar el tirón como otros ayuntamientos. Roquetas ha dejado su presupuesto en la mitad, aunque nosotros no vamos a llegar a eso."
Sólo está a salvo de esta bajada del gasto corriente las políticas sociales, por lo que Rosario Soto podría continuar la línea de ayudas, cada vez más solicitadas por familias necesitadas, que presta desde el área de Atención Social.
La contención en el gasto que el funcionamiento del Consistorio genera repercutirá sobre el ciudadano con las medidas anticrisis que el alcalde quiere poner en marcha para hacerle más llevadera la economía al contribuyente, como la bajada del tipo del IBI.
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