El alcalde de Almería afirma que el decretazo "es una vuelta de tuerca más a la situación de asfixia de los ayuntamientos"

Considera la medida “injusta” porque trata a todos los consistorios por igual cuando la situación del Ayuntamiento de Almería “es razonable”

LAEDICION.NET.-ALMERÍA.- El alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, ha manifestado esta mañana que el decreto del Gobierno que impide a las entidades locales acudir al crédito público o privado a largo plazo a partir del 1 de enero de 2011 y hasta el 31 de diciembre del mismo año es “una vuelta de tuerca más a la situación de asfixia a la que este Gobierno tiene sometidos a los ayuntamientos”.

El primer edil ironizaba con el Gobierno del Zapatero “que no da bandazos, pero ayer los ayuntamientos no podíamos endeudarnos a largo plazo para inversiones a partir del día siguiente de la publicación del decreto y hoy es ya desde el 1 de enero del año que viene.
En cualquier caso, es una situación injusta porque se trata a todos los ayuntamientos de la misma manera y, por ejemplo, el de Almería está en una situación razonable, dentro de un contexto de crisis, no de bancarrota como están otras instituciones municipales”, ya que el nivel de endeudamiento del ayuntamiento capitalino, según recordó, alcanza el 55 por ciento, la mitad de lo legalmente establecido.
“Nosotros estamos respondiendo a los pagos con normalidad y esta medida supone, sin duda, una cortapisa para seguir invirtiendo en la ciudad”, ha explicado el regidor almeriense, para quien, a partir del año próximo, “las inversiones tendrán que realizarse con recursos propios, detrayéndolas del gasto corriente porque no podremos acudir a las entidades financieras para afrontar los gastos que comportan, lo que agrava aún más la situación difícil y complicada que tienen la mayor parte de los ayuntamientos”.

Respecto a la rebaja de sueldos de alcaldes y cargos electos municipales, Rodríguez-Comendador ha señalado que “hay conversaciones entre los dos grandes partidos políticos para llegar a un acuerdo común y la rebaja oscilará en torno al 15 por ciento”.