El rock de Queen, inmortal

El público estuvo en pie la mayoría del tiempo por la emoción que suscitó el espectáculo • Michele McCain destacó en sus actuaciones y Graciela Armendáriz puso a todos los asistentes en pie con 'Barcelona'
LAEDICION.NET.-:/ Redacción.-Canciones del mítico grupo Queen aderezadas por la música de una orquesta sinfónica y cuatro voces que convencieron a los asistentes que acudieron al espectáculo que se celebró en el Auditorio Municipal con motivo de la XXXV Festival de Teatro de El Ejido.

One World Symphonic Orchestra y Rock Band Queen Symphonic Rhapsody contaron con las grandes voces solistas de Michele McCain, Thomas Vikström, Mats Levén y Graciela Armendáriz.

El espectáculo comenzó con un solo de saxo y la voz de la soprano Graciela Armendáriz que se dirigió hacia el escenario en el que se proyectaba en una pantalla imágenes del mundo y el mar.

Los primeros vítores del público se escucharon en la primera actuación, pero el público comenzó a levantarse de su butaca con la actuación de Michele McCain y su interpretación del tema Somebody to Love, que arropada por plumas amarillas entró como una auténtica diva. Cada intervención de la cantante era esperada entre los asistentes.

Thomas Vikström ofreció alguna de las baladas de la mítica banda como Love of my life, momento en el que se descubrió la Orquesta Sinfónica.

Thomas Levén puso el toque más rockero a la cita con la interpretación de One Vision. Con esta canción, el público levantó las manos y aplaudió, llevando el compás de la música. En muchas de las notas desgarraba la voz para emocionar y levantar a los asistentes.

Volvió Michele McCain, pero en esta ocasión tocaba imprimir un estilo soul al espectáculo con el tema Crazy Little Thing Called Love. El buen rollo de la artista contagió a todo el Auditorio. Uno de los momentos más esperados y que hizo vibrar al público es cuando se interpretó We will rock you.

Otro de los temas con los que se metieron al público en el bolsillo fue con Don't stop me now, que fue una de las canciones finales que se interpretó antes del descanso, junto a Show must go on y A Kind of Magic, para que los asistentes se fueran con buen sabor de boca antes de comenzar la segunda parte.

En el Auditorio se pudo ver una mezcla de generaciones y de distintas nacionalidades. Se podían ver algunos británicos bailando y ofreciendo todo sobre la escena.

En el segundo apartado destacó Friends will be Friends en el que algunos cogieron al más próximo y se balanceaba al compás de la música. Otro de los temas fue I want to break free en el que homenajearon el videoclip del grupo y los dos cantantes se vistieron con falda. El ambiente fue caldeándose con We are the champion. No faltó Barcelona que levantó a todo el público de sus butacas para ovacionar a los cantantes. Los artistas emplearon todos los espacios disponibles como los palcos y los pasillos. Acabaron con We will rock you entre la emoción apasionante del público.