jueves, 31 de mayo de 2012

José Manuel Soto: " Ha sido un camino largo y sigo caminando y no siempre ha sido fácil"


José Manuel Soto:"La fama por sí misma no la entiendo y no me interesa."
Se ha metido de lleno en la SGAE y en su peor momento.
Soto ha ido cuajando su faena paso a paso, en cada son, en cada acorde.

LAEDICION.NET.-:/ Redacción.- “El papel fundamental de la SGAE no es recaudar” Cuanta falta nos hacen los artistas para que las crónicas ganen cuerpo y hechura. Qué placer escribir sobre alguien que tiene oficio, vocación, trayectoria; que es profesional en lo suyo. Así como lo leen. Qué si, de verdad, que sigue existiendo gente así aunque a veces no lo parezca. Podríamos hablar de tantos pero hoy toca José Manuel Soto.
Escuché su voz y su música a finales de los ochenta en una sala madrileña en la que había poco más de cuatro gatos. Era un perfecto desconocido fuera de su tierra. Recuerdo su firme decisión de lanzarse al mundo de la música sin más red que su voz y sus historias que cantar. La otra noche en el Nuevo Apolo de Madrid volví a escucharlo en directo después de mucho tiempo, arropado por nueve espléndidos músicos. Artista: ni más ni menos.
Soto ha ido cuajando su faena paso a paso, en cada son, en cada acorde. Despacito, como El Piyayo, tomándose su tiempo, sus pausa; forjando su camino hasta abarrotar el pasado junio la Maestranza de Sevilla como los buenos toreros.
-Cúanto tiempo desde el último concierto en Madrid.
-Mucho. Tenía ganas y vivimos una noche especial de esas con magia, de encuentros y reencuentros . Hay muchísima gente que no me ha visto nunca en directo . Ahora después de tantos años me están redescubriendo.
- ¿Internet mata la música?
Existe y está ahí. Sólo se trata de que los artistas podamos seguir viviendo de nuestro trabajo y quien escoja bajarse música que sea como una compra.
- 25 años de música, en su caso, media vida.
- Ha sido un camino largo y sigo caminando y no siempre ha sido fácil. He vivido momentos buenos y otros realmente malos. Pero la música es así. Ahora estoy viviendo una etapa dulce, muy dulce pero te confieso que estuve a punto de abandonar. Noches difíciles, muy duras, cantado en sitios que no me gustaban, por pura supervivencia. En todas las profesiones puede pasar: la vocación está ahí pero no sale bien. El secreto está en aguantar y seguir. Por eso después de un parón importante pensé en el todo o nada y llegó la noche de la Maestranza. Había que hacer algo grande. Era mi ciudad, me acompañaron grandes amigos artistas y grabamos un disco en directo. Fue un revulsivo. Gente que me había perdido de vista y me ha recuperado, gente joven que sólo me conocía por sus padres, en algún viaje en coche. Ahora, tuiteo con gente de la edad de mi hijo. ¿Sabes lo grande que es eso?
-Parece que hay mucho cantante de triunfo efímero.
-Siempre surgen nombres nuevos que tienen de pronto un exitazo. A la gente le da por alguien que triunfa que parece que se come el mundo y luego el mundo se lo come a él. Pasa en la música , en toro, en el fútbol… Esto es un paso a paso, el día a día, el poder mantenerse, el único camino para seguir siendo lo que quieres ser. El tiempo es fundamental.
.-¿Qué hay fuera del escenario?
-Dos vidas muy separadas desde siempre. Mi vida familiar, marcada por una mujer y unos hijos, y la profesional en la que me agarro al trabajo, mis músicos, mis canciones, el público. Es difícil compaginarlas pero es lo que he elegido. Ahora ha cambiado en parte y es que mis hijos, que se quieren dedicar a la música, me acompañan. Ya no dejo mi casa y mi familia para ir a cantar solo. Pero es importante separar las cosas. Cuando tienes una vida pública vas buscando la intimidad de la familia y alejarte de todo lo demás.
En esta gira de los 25 años de Soto, comparte tablas con su hijo Marcos. No se parece en nada a él, su estilo es otro y su arte tiene otro ritmo pero engancha oírles juntos con el bellísimo ¿Quién eres tú? Habrá que seguirle la pista al niño.
-En alguna ocasión ha dicho: Menos fama y ser más libre.
-Sin duda. Nunca he buscado la fama. Creo que sólo es consecuencia de un trabajo y el reconocimiento por ello. La fama por sí misma no la entiendo y no me interesa. Decidí hace mucho tiempo dedicarme a una profesión de cara al público y cargo gustoso con la parte que me toca. Quienes suelen buscar la fama por sí misma suelen ir directos al batacazo.
-Se ha metido de lleno en la SGAE y en su peor momento.
-No lo había pensado hasta que me llamaron y sentí que tenía parte de responsabilidad. He ido con la candidatura liderada por José Miguel Fernández Sastrón y hemos ganado en el ámbito de lo que se llama pequeño derecho, que son los autores.
-Pues ya pueden afanarse en cambiarla de arriba abajo
-Ha habido una mal gestión en general. Se ha convertido en una institución antipática, casi policial. La recaudación es importante pero no lo básico. No es el papel fundamental. Es más importante defender al autor por su creación y defenderla como un trabajo más.
Soto es autor de la mayoría de sus canciones. Le gusta componer y es su vocación pero cuando canta y, como él cuenta, ve que llega a la gente es cuando “llega la plenitud”. Dieciocho discos, 25 años en el escenario. Dice que el secreto está en seguir creyendo y que en los tiempos de crisis el artista puede transmitir mucho. Ahora está de gira y hay mucho Soto después de “Por Ella”. Tanto que en Londres le esperan el próximo 29 de junio en la Union Chapel, un antigua iglesia convertida en sala de conciertos. Paloma García-Pelayo

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