martes, 26 de febrero de 2013

El Guadalquivir devolvió el cuerpo de María Isabel


LAEDICION.NET.-Las investigaciones apuntaban al Guadalquivir y ha sido el río el que ha devuelto el cuerpo sin vida de María Isabel Sierra, la joven de 22 años de Coria del Río que permanecía desaparecida desde el jueves de la pasada semana. Han sido tres pescadores los que avistaban a primeras horas un cuerpo en un pantanal y poco después llegaba la confirmación: primero, un tío de la joven, y después, de forma oficial. El luto teñía Coria y su novio declaraba: “ya había amenazado antes con hacer alguna tontería”.
Minutos después de que se celebrara una concentración en apoyo a la familia de la desaparecida ante el Ayuntamiento de Coria comenzaban a llegar los primeros rumores. Tres pescadores habían avistado un cadáver en una zona pantanosa ubicada entre la finca Morante y el bar El Velero, entre La Puebla y Coria, dando inmediatamente aviso a la Policía Local y al 112.
Ellos mismos ayudaron a recuperar el cadáver, que al momento quedaba a disposición del dispositivo policial que el día anterior había buscado su cuerpo sin éxito por esa misma zona del río, donde se tenían las últimas pistas de la joven desaparecida, que volvía de La Puebla del Río a Coria tras haber quedado con su novio, Rafael.
Él mismo ha declarado a Europa Press que la fallecida “ya había amenazado con hacer alguna tontería” en anteriores discusiones y que el día anterior a su desaparición le comunicó que “cortaba la relación” porque María Isabel “se había metido sin yo saberlo en mi Tuenti y había cogido el teléfono de la única amiga” que tenía en esta red social.
“Tras coger el teléfono, empezó a amenazarla, por lo que decidí dejarla”, ha relatado Rafael, quien ha señalado que, al día siguiente, la fallecida, “que era muy celosa”, se dirigió sobre las 16,00 horas a su vivienda de La Puebla “para hablar del asunto”. “Estuvimos hablando una hora y media, y tras ello se fue, aunque yo la vi rara y muy ausente, como pensando en otras cosas”, ha apostillado.
Por este motivo, y según ha añadido, “le dije que me llamara cuando llegara a casa, e incluso llamé a dos de sus hermanos y les dije que ya iba de vuelta”, y “como no me llamaba, llamé a su madre, que me dijo que ya estaban buscándola” porque no había regresado a su domicilio.
Rafael ha subrayado que la víctima “ya había amenazado antes con hacer alguna tontería, pues no quería que lo dejara con ella”, e incluso ha desvelado que “en alguna ocasión se fue sin dejar rastro, pero apareció a las dos horas, no como ahora”.
Asimismo, ha puesto de manifiesto que María Isabel “había estado tomando tranquilizantes, porque tenía problemas psicológicos”, aunque “hacía ya tiempo que había dejado el tratamiento”, según afirmaba.
Según la inspección ocular, el cadáver no presenta signos aparentes de violencia, aunque  la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Sevilla será la que determine las causas del fallecimiento, según revelaba a Efe Francisco Sierra, tío de la joven y portavoz de la familia.
Los investigadores suponen que el cuerpo ha empezado a flotar 72 horas después de permanecer sumergido, puesto que en la zona en la que ha sido hallado ya fue rastreada por la Policía el domingo.
El juez de Instrucción número 3 de Coria, Antonio Guisado Zúñiga, se ha encargado de la investigación y es el que ordenó el levantamiento del cadáver, después de que la Policía Nacional acordonara la zona, en la que han permanecido durante más de una hora varias patrullas de la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local, además de un furgón laboratorio de actuaciones especiales de la Policía Nacional.
El Ayuntamiento de Coria del Río, donde reside la familia, ha decretado tres días de luto y ha colocado crespones negros en las banderas de la sede municipal, que ondean a media asta.
La familia de María Isabel Sierra Cuerva, de 22 años, denunció la desaparición de la joven, que se produjo el pasado jueves, después de visitar a su novio en la vecina localidad de La Puebla del Río.
Según la familia, la joven discutió con su novio y decidió volver andando hasta su casa por un camino situado en el margen del río Guadalquivir

No hay comentarios: