miércoles, 20 de marzo de 2013

Logra la dación en pago para evitar el inicio de un proceso de desahucio de Caja Granada


LAEDICION.NET.- Isla Cristina ha vivido una jornada de protesta sonora en apoyo de Gema García, una mujer isleña, que lleva un año sin posibilidad de abonar la hipoteca de su casa, y ante el temor de que se iniciara el proceso judicial que puede culminar en el desahucio, dejándole una gran deuda pendiente, reclamaba de la Caja de Granada la posibilidad de devolver el piso sin que quedara nada por pagar.
    Según declaró la afectada a Viva Huelva, su mayor preocupación residía en que, al haber sido avalada por sus padres, su madre, viuda a día de hoy, pudiera verse también afectada por un desahucio.
    Gema está desempleada. Es diseñadora de cocinas, un empleo, en el que antes de la quiebra de la burbuja inmobiliaria tenía bastante trabajo, pero que ahora, no va a ninguna parte. Ha probado como camarera, dependienta,... de lo que ha hecho falta, y actualmente, busca trabajo en Sevilla a ver si tiene más fortuna, mientras que se ha tenido que ir a vivir con su madre, porque con los pocos ingresos que tiene por un subsidio recién conseguido, no tiene ni para comer.
   Gema expone su caso, especialmente sangrante, ya que por un lado, se queja de que por ser soltera, parece que no tiene derecho a nada, pero padece igual las consecuencias del desahucio y la deuda, por otro, porque ha visto como la cuota mensual se ha incrementado desde 700 a 1.000 euros al mes, debido a que pidió un aplazamiento del pago de dos años en su día, de tal forma que “pese a que tenía una hipoteca de 175.000 euros, actualmente me reclaman más de 200.000”, y eso, asegura, después de haber pagado “más de ocho millones de las antiguas pesetas” (unos 48.000 euros).
Un primer intento
Gema asegura que había hablado antes con otro director de la sucursal, reclamando por escrito (“en un papel a mano”) la entrega de la vivienda con dación en pago,es decir, desentendiéndose  de cualquier deuda pendiente, pero que el banco le había dicho que no, y que le exigía el piso y además, 30.000 euros: ahora, asegura que que “la protesta y el ruido” han conseguido que la caja se avenga a su petición. Por eso, esta más tranquila, pero desea “tener el compromiso por escrito” porque no descansará hasta que lo tenga.
    Por su parte, Tomás Gómez, de la plataforma Stop Desahucios de Huelva, presente ayer en el acto de protesta, junto con una treintena de personas más, en las puertas de Caja de Granada asegura que ahora van a dar un margen de confianza al banco, después de que mañana (por hoy), tienen previsto entregar el documento con la petición de Gema García, para la que esperan una respuesta en el plazo de quince días.
La lucha de Stop Desahucios
Gómez considera, que ha sido una vez más la protesta y la presión popular, a las puertas de la entidad bancaria, la que ha logrado el compromiso de la misma para acceder, acogiéndose al Código de Buenas Prácticas que Caja Granada firmó en su día, conseguir un resultado favorable para una mujer con serios problemas para pagar, por falta de trabajo, porque la regulación por decreto del Gobierno resultaba insuficiente para atender su caso.

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