Se inicia en París el juicio a 18 presuntos etarras, seis de ellos en busca y captura

El Tribunal Correccional de París inició hoy un juicio contra 18 presuntos etarras, seis de los cuales están en busca y captura, que integraban o colaboraban con el aparato de reserva de la banda terrorista cuando fue descabezado su núcleo dirigente en una amplia redada policial en junio de 2004.
Entre los acusados figura el histórico de ETA Ignacio López de Vergara, considerado jefe de los grupos de reserva hasta que fue arrestado en la citada operación en Francia. Es uno de los once que comparecen detenidos.
Igualmente se sientan en el banquillo Luis Armando Zabalo, Benito Fermín Martínez, "Demonio", Juan Carlos Estévez Paz, Asier Aguinako, Aitziber Coello y Alberto Saavedra, capturados el mismo 17 de junio de 2004 en Limoges, Le Mans y Angers, al centro y oeste de Francia.
Con ellos, y también entre rejas, está Zígor Garro, considerado jefe del aparato logístico de ETA cuando fue arrestado el 29 de noviembre de 2006 en Quézac (sur), junto a su compañera Marina Bernadó, igualmente juzgada en esta vista.
El día de su arresto, Garro había sido condenado en rebeldía a siete años en un juicio en París a 14 etarras, incluido uno de los que le precedieron al frente del aparato logístico.
Asier Eceiza, que figuraba en busca y captura al comienzo de este sumario y al que se consideraba uno de los presuntos responsables del aparato militar, fue arrestado el pasado mes de julio cerca de Dijon junto a una supuesta miembro del comando Vizcaya de la banda y es el undécimo de los encarcelados presentes en la vista.
El último de los que comparece es Peio María Álvarez, arrestado en la localidad vascofrancesa de Ciboure el 7 de febrero de 2007 y que está en libertad bajo control judicial.
Al iniciarse la vista con la identificación de los encausados, varios de ellos corrigieron al presidente del tribunal, Philippe Vandingenen, cuando decía que las localidades en las que habían nacido estaban en España y que su nacionalidad era española.
"No es España" gritó Garro, que le negó al magistrado "legitimidad" para juzgarle y tachó el proceso de "mascarada".
A las preguntas de Vandingenen, Eceiza se negó a colaborar con un "no tengo nada que hablar contigo", dicho también en francés.
La abogada defensora, Yolanda Molina, pidió un intérprete en euskera para que sus clientes puedan "hablar en su lengua".
"El tribunal juzga a vascos, nacidos en el País Vasco" y el euskera "es la lengua en la que mejor pueden expresarse", argumentó Molina, que añadió que "algunos pueden hablar muy parcialmente en francés, otros conocen el español". Además, hizo hincapié en que el euskera es oficial "en el Estado español", en el País Vasco.
El presidente del tribunal le respondió que no es posible un intérprete en euskera por "cuestiones de disponibilidad" y precisó que no cuentan con personas que puedan cumplir esa misión "con total objetividad".
Además de los 12 presentes en el Palacio de Justicia de París, están acusados en este proceso otros seis supuestos miembros de la organización terrorista buscados por la policía, empezando por el presunto jefe del aparato militar de ETA, Garikoitz Aspiazu, "Txeroki".
Los otros cinco son Tomás Elgorriaga Kunze (ya condenado en rebeldía en Francia, Beñat Atorrasagasti, Javier Arruabarrena, Iván Apaolaza y Ekai Alcorta
A todos los acusados se les imputa, entre otros, el cargo de asociación de malhechores con fines terroristas, penado con un máximo de diez años de prisión, pero que puede elevarse a 20 años para los reincidentes como López de Vergara, "Demonio", Estévez Paz, Garro y Zabalo.
Este juicio en el Tribunal Correccional de París, que se prolongará hasta mediados de la semana próxima, debe servir para determinar la responsabilidad de todos ellos en el dispositivo del aparato de la reserva.
Un dispositivo que, según el sumario, incluía, entre otros, coches robados, armas, cientos de documentos robados y/o falsificados o la fabricación de bombas lapa.
Garro y Bernadó tienen que responder por su supuesta implicación en la falsificación de documentos y en la aportación de otros elementos al aparato de reserva, para lo cual el acta de acusación considera que utilizaron el dinero -procedente de la extorsión de empresarios- que recibían del que fuera jefe de logística, Félix Ignacio Esparza Luri.