Un falso aviso de bomba en el barrio de las 200 Viviendas de Roquetas de Mar, donde se produjeron los hechos que acabaron en la muerte de Ousmane Kote, un joven senegales, hizo que la Guardia Civil de Almería activase un dispositivo y acordonase la zona en la que supuestamente se encontraba el artefacto explosivo.
La llamada se efectuó el pasado sábado 27 de septiembre según ha concretado la Guardia Civil. Inmediatamente se procedió a acordonar por completo la zona afectada y se trasladó un equipo de desactivación de explosivos, así como a un perro detector. Finalmente, todo quedó en una falsa alarma.
La Guardia Civil de Almería recuerda que la persona que efectuó la llamada ha cometido un delito, por lo que puede proceder con su detención en el mismo momento que se identifique.
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