Sr. Director:
El gran abrazo de la muerte que se dieron Leire Pajin y Bibiana Aído, después de que fuera aprobada, por el Senado, la ley del aborto, fue esperpéntico. El aborto libre hasta la semana 14, despenalización del mismo y que las adolescentes, menores de 16 años, prescindan de la autorización paterna para poder abortar. Fue una aciaga y bufona verbena pro abortista. En este día fúnebre se aprobó la ley asesina del aborto, a las espaldas de los millones de españoles que se han manifestado en su contra, de los científicos y de los educadores. La segunda víctima atormentada del aborto es la madre. Millones de jóvenes de todo el mundo, se han hundido en el engaño del aborto. Casi todas ellas están penando el "síndrome post-aborto". Así lo prueba la institución abortista más significativa del mundo, la Federación Internacional de Planificación Familiar, al aseverar que: "la incidencia del trauma post-aborto para las jóvenes que permiten matar a sus hijos, a través de medios quirúrgicos, puede alcanzar hasta el 91% de los casos." Las secuelas que sufren las jóvenes que abortan son; zozobra, desesperación, delirios, desvelo, embriaguez, drogadicción, psicosis y, por último, el suicidio.
Gabriel Roselló
miércoles, 12 de mayo de 2010
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