Belén Esteban imagen de una marca de cosméticos

LAEDICION.NET.-DANIELLA MONTENEGRO.-Que Belén anunciara sartenes, tenía un pase, aunque es evidente que ella no sabe cocinar. Lo de anunciar carne de conejo, me resultaba un poco más perturbador, porque ¿quién querria comer el conejo de la Esteban? ( perdón por el chiste fácil, pero no me he podido resistir ), lo de los zapatos resuta irónico ya que demostró en Mas que Baile, que tenía dos pies izquierdos, por lo que siempre le sobra un zapato de cada par. Pero sinceramente no entiendo porqué una empresa decide suicidarse de manera pública y notoria. El contratar a la princesa del pueblo para promocionar sus productos es tener una bomba de neutrones en el sótano, en principio se puede pensar que es un seguro de vida, pero si explota se lo lleva todo por delante. Es cierto que Belén Esteban despierta muchas simpatías, sobretodo muchas señoras ven en ella una especie de cenicienta pero con un final infeliz, y nada suscita más ternura que un pollo picoteado. Pero diez años de estrellato televisivo dan para mucho, y sus no pocas muestras de soberbia han hecho suscitar muchos odios entre telespectadores que ven en ella una estrellona con un rumbo incierto.
Pero por increíble que parezca siempre hay por ahí, alguna mente pensante que decide que apostar por la Esteban es apostar por caballo ganador, sin darse cuenta que en realidad es un caballo desbocado.