sábado, 21 de abril de 2012

El PSOE trabaja en un expediente sancionador contra Diego Asensio

Un centenar de firmas lo solicitaron a la dirección general en el último comité LAEDICION.NET.-:/ Redacción Twitter @LaEdicin.-La Dirección Provincial de los socialistas almerienses prepara la tramitación de un expediente sancionador contra quien fuera su secretario general hasta el pasado 3 de junio, Diego Asensio, por sus manifestaciones cuando 27 de los 40 integrantes de su Ejecutiva presentaron su renuncia, lo que suponía su cese inmediato y la convocatoria de un Congreso Extraordinario para elegir una nueva dirección. Así lo ha podido confirmar este medio de fuentes de toda solvencia que aseguran que en el último Comité Provincial celebrado en la localidad de Níjar después de las elecciones andaluzas, hasta un centenar de firmas se lo solicitaron al secretario general.
8 FOTO DE ARCHIVO9 Y es que después de unos resultados medianamente presentables en los comicios regionales, la utilización de las frases del exsecretario general en la campaña electoral del Partido Popular, aún resonaban en más de un oído: "Griñán va en contra de los intereses de Almería" se escuchaba en los anuncios. Cuando falta una semana para cumplirse el mes desde las elecciones andaluzas, puede que esas manifestaciones comiencen a pasarle factura. Todo se desencadenó en una noche, la del 2 de junio del año pasado. En esas horas, cristalizaba un pulso que comenzó con la salida de Martín Soler del Ejecutivo de José Antonio Griñán. Empezaba un pulso apenas disimulado entre la Dirección Provincial cuyas cabezas más sobresalientes eran el propio exconsejero y a quien había dejado a cargo del partido en el Congreso Provincial del PSOE de Almería celebrado el 19 de julio de 2008. Diego Asensio asumía la defensa numantina de un modo de entender el partido que se desangraba por todos sus costados. Comenzaron, no importa las veces que se negó, un enfrentamiento con la Dirección Regional de Sevilla que respondía una a una a las decisiones tomadas desde Almería. Uno a uno fueron cayendo todos los soportes con los que se trataba de apuntalar una figura que comenzaba a dar signos de debilidad. Las maniobras que trataban de contener el naufragio, no conseguían nada más que escorar la nave que se dirigía hacia su más profundo abismo. Asensio era el encargado de salvaguardar lo poco que quedaba de un Clan de Cuevas que vivía sus últimas horas. Un movimiento encabezado por Antonio Bonilla, alcalde de Vícar uno de los últimos bastiones que le quedaron al PSOE después de unas municipales catastróficas y con figuras como Juan Antonio Segura Vizcaíno (quien luego coqueteó con el propio Asensio en cuanto vio la oportunidad de conseguir beneficios propios), Esperanza Pérez, Yolanda Callejón o José Manuel Ortiz. Junto a Diego Asensio permanecieron Martín Soler, Nerea Hernández, Anyes Segura, Joaquín Jiménez, Francisco Sánchez, José Asensio, Ana Cano, Juan Miguel Tortosa, María José Aliaga y Juan Miguel Peña. El resto le obligaban a salir del partido de la peor forma posible. Llegó entonces la rueda de prensa que ha llevado a estas consecuencias. En ella, Diego Asensio se despachó a gusto, como nunca un secretario general se ha atrevido a hacerlo, arremetiendo contra el presidente de la Junta de Andalucía y secretario general del PSOE en la comunidad autónoma, a quien acompañó apenas 24 horas antes a visitar una cooperativa agrícola para comer pepino en plena crisis del E.Coli. Denunció "agresiones", su "talante autoritario" y de "no defender los intereses de Almería; por el contrario, José Antonio Griñán se ha dedicado a perjudicar los intereses de nuestra tierra, anteponiendo de manera general sus intereses personales a sus deberes como presidente de todos los andaluces". Ahí quedó eso. Después del 25-M donde la dirección encabezada por Sánchez Teruel consiguió salvar los muebles, las consecuencias no se han hecho esperar. El PP diseñó una habilidosa campaña publicitaria en la que utilizaba la voz del propio Asensio para atacar a Griñán; el mundo al revés. En el Congreso de Níjar, puede haber comenzado a gestarse lo que muchos solicitaron ese mismo día, la apertura de un expediente sancionador que conducirá a la expulsión del PSOE de su exsecretario general. Diez meses después.

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