domingo, 25 de enero de 2009

Todos esperan algo de Obama

El nuevo presidente ha generado grandes expectativas en todo el planeta ante la esperanza de que su gestión esté en las antípodas de los dos mandatos de Bush
Barack Obama ha generado grandes expectativas en el mundo tras el doble mandato de George W. Bush y su gestión de Iraq, el combate al terrorismo, el cambio climático o las relaciones con Rusia. La comunidad internacional esperaba con impaciencia al 44 presidente de EEUU, tradicional aliado de Israel, en pleno conflicto en Gaza. Obama aseguró que se implicaría en la situación en la Franja "inmediatamente" después de asumir el cargo. "La primera y más inmediata" preocupación de Obama en política internacional debe ser Oriente Próximo, sugirió el primer ministro británico Gordon Brown.

Se espera que el nuevo presidente adopte una postura muy diferente a la de su predecesor, cuyo mandato quedó marcado por una invasión en Iraq que resultó nefasta para la imagen de EEUU en el mundo árabe. Su secretaria de Estado, Hillary Clinton, ya ha indicado que pretende conseguir un acercamiento diplomático a Siria e Irán, confirmando la promesa electoral del ahora presidente de abrir un diálogo con Teherán, uno de los integrantes del eje del mal de Bush.

"Nos gustaría mucho contribuir a estabilizar la región [de Oriente Próximo]. Pero debemos implicarnos y no aislarnos como hasta ahora", señaló el presidente sirio, Bashar al Asad, en una entrevista al diario alemán Der Spiegel. El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, aseguró que su país espera un "cambio de comportamiento" de EEUU, principalmente que "dejen de entrometerse en los asuntos de otros países".

Una de las primeras obsesiones de Obama, según sus colaboradores, era ordenar el cierre del centro de detención de Guantánamo, en Cuba, símbolo de los excesos en la lucha antiterrorista de su predecesor. Y lo hizo el jueves. En Iraq, el Pentágono ya prepara los planes para la retirada acelerada de las tropas que el presidente prometió durante su campaña. Sus esfuerzos militares se centrarán ahora en la guerra de Afganistán, principal frente de Obama en la lucha contra el terrorismo, donde prevé desplegar hasta 30.000 hombres más en 18 meses.

"Esperamos ver un cambio radical en la forma en que libramos la guerra contra el terrorismo", declaró Homayun Hamidzada, portavoz del presidente afgano Hamid Karzai, añadiendo que "la solución [al conflicto afgano] es un acercamiento regional".

Tanto en Afganistán como en la India, los dirigentes acusan a Pakistán de apoyar a los grupos extremistas que cometen ataques terroristas en su territorio, como el de Bombay en noviembre. "La India quiere ver cómo responderá la Administración Obama a Pakistán y qué presiones ejercerá sobre este país para [acabar con] el terrorismo", recuerda Lalit Mansingh, ex embajador de la India en Washington.

La nueva Administración heredará unas relaciones especialmente tensas con Rusia, que durante el conflicto de Georgia recordaron en algunos momentos a las de la Guerra Fría. El primer ministro ruso, Vladimir Putin, calificó hace una semana a Obama como hombre "sincero y abierto" que ha dirigido mensajes positivos a Moscú, aunque añadió que Europa no debería esperar demasiado.

Otra potencia regional, China, cuya estabilidad política se debe a un crecimiento económico excepcional, estará atenta a cualquier refuerzo del proteccionismo por parte de EEUU.

El mundo también ansía ver cómo se traduce el compromiso de Obama contra el cambio climático, tras acusar a su predecesor de ignorar el problema.

Sin embargo, hoy en día la crisis económica mundial se sitúa como prioridad número uno. La cumbre de países avanzados y emergentes, el G20, que se celebrará en abril en Londres, ha creado grandes expectativas entre quienes desean establecer nuevas reglas para las finanzas internacionales.

No hay comentarios: