El Fandi y Perera salen a hombros. Y un cuerno

LAEDICION.NET.-A.Rico.-Muy buena entrada para presenciar esta segunda de Feria de Roquetas de Mar. Las reses de Luis Algarra, de aceptable presencia, excepción del corrido en segundo lugar demasiado anovillado. Sus pobres encornaduras disgustaron al respetable.
Juan Serrano “Finito de Córdoba”, oreja y saludos tras petición
David Fandila “El Fandi”, dos orejas y dos orejas con insistente abucheo al juez-presidente al no conceder el rabo del segundo.
Miguel Angel Perera, dos orejas y oreja.
Salen a hombros por la puerta grande, El Fandi y Perera, en loor de multitud que les esperaba en la explanada para rendirles su homenaje.
LO DEL CUERNO
Con buena entrada para esta segunda de Feria en Roquetas de Mar, y el mejor de los ambientes para echar una buena tarde de fiesta. Veamos, ocho orejas y un cuerno. No obstante la sonora protesta del respetable por lo del cuerno, enseguida sale el sobrero y aquí no ha pasado nada hasta que Don Adrián, que así se llama el Presidente, decide no conceder el rabo al Fandi tras la faena al segundo de su lote, originando el abucheo más importante que se haya podido producir en una plaza de toros. Aquí no ha pasado nada. Hemos venido a divertirnos y eso es lo que hay. A mí, también me gusta la diversión, pero lo del cuerno...no me voy sin contarlo.
Ya que va de cuernos, diré que los astados de Don Luis Algarra Polera aceptables de presentación, con un segundo anovillado (en canal, dos montones y poco más), cuarto manso, y quinto y sexto “paraos” y ello sin apenas llegarle al pelo la de detener; primero y primero bis, segundo y tercero bravos. Va de cuernos hemos dicho y es cierto, pobres de encornadura los de Luis Algarra y con un primero que al leve contacto con el peto deja al descubierto toda la clavija ósea (el hijón) semiensangrentada con la vaina completa acusadora desprendida y sobre la arena que El Fandi recoge para entregarla al mozo de espadas. Hagan ustedes la lectura del tema. Comprendo que muchos aficionados esten preocupados con el acentuado y constante fraude en la Fiesta. El Público testigo reaccionó sensible, para de inmediato tras la sustitución, olvidarlo y recuperar el ambiente festivo de la tarde. Esto me ha dolido. No me hartaré de clamar, aunque lo haga en un medio público internacional y parezca que fuere en un desierto.
Juan Serrano “Finito”, gana con el tiempo. Su ensolerado arte no vamos a descubrirlo ahora, así como tampoco su falta de ambición. Se mueve en estos circuitos, fuera de las grandes ferias, para darse en breves dosis de mesura y arte a base de una lidia ordenada, incluso con intervención directa como con el manso, segundo de su lote, al que la cuadrilla no dió la cara; toreo a la verónica majestuoso y ligado y con faenas de muleta donde su recorrido ligado igualmente “a y sobre el compás” fluía armónico y sentido. Mató perfecto a su primero, para una oreja y al segundo con menos acierto para fuerte petición y saludar desde el tercio.
David Fandila “El Fandi”, servicio de plaza en lo del “cuerno”, debe asumir la obligación que le impone la toreria que condensa como torero. El público de Roquetas, el de Madrid, Granada o Zaragoza, merecen lo mejor. En Roquetas tan sólo ha dado parte de su verdad a esta plaza que evoluciona, a una población que cubre presupuestos colaborando con la Fiesta, por lo que nos permitimos sugerirle no confunda los “ólés” cariñosos con los “sentios” que también le acompañaron. Muy bien con el capote en ambos enemigos y con la franela más revoltoso que torero, no nos gustó en esta ocasión; con las banderillas acabaremos creyendo en él cuando cuadre, que no lo hace. Matando, perfecto en ambos. Dos orejas y dos orejas.
Miguel Angel Perera, no cede en su empeño de..., sea Roquetas o la Capilla Sixtina del Arte del Toreo. Muy bien, muy bien en su primero, al que sacó toda la nobleza que es capaz de dar un toro bravo,despues de unas primeras embestidas agresivas y que ya comenzó a ahormar en un quite combinando saltilleras, chicuelinas y revolera final, ejecutado tras el abandono de las plazas montadas por lo que el director de lidia hubo de reordenar ésta, con la sóla presencia de los tres primeros espadas en la arena (me gusta esto de la liturgia taurina) durante el quite en cuestión; faenón de muleta, sobre ambas manos, siempre ligado y en el terreno díficil donde se pone más, se aguanta más y con el riesgo de desajustar la distancia y perder toda posibilidad de lucimiento; hubo momentos en los que el toro, desde su nobleza, miraba por detrás del cuerpo de Perera en busca de la franela. Importante, muy importante el dominio de Perera, que en Roquetas alcanzó cotas inimaginables y...¡le hemos visto cosas! Gran estocada y dos orejas. En el segundo, parado total, despues de dos aceptables primeros tercios, que nos hicieron pensar en el toro de la corrida; pese a la poca sangre de la puya; el romperse “cebao” con los petos, pudo residir la razón de su poco juego; justo seria reconocer que en ningún momento dió sensación de rejarse por falta de bravura; faltó motor para ese fondo de bravo que no se pudo ver, por lo que hay que seguir trabajando en la ganaderia de Algarra, y mientras tanto si da una explicación por lo sucedido con ese cuerno...mejor. Buena estocada y oreja, que si por la estocada, vale.