La guerra de la bosch

LAEDICION.NET.-:/ Redacción Twitter @LaEdicin.-La guerra abierta que mantienen desde hace tiempo Lydia Bosch y su ex marido, Alberto Martín, ya hace tiempo que alcanzó tintes de telenovela. Por eso, hasta cierto punto, empieza a no asombrarnos de qué son capaces los dos miembros de esta desestructurada pareja. ha llevado ante los tribunales al arquitecto. En esta ocasión, Lydia le exige a Martín que desaloje el piso que Alberto empezó a utilizar como estudio después de que se casaran. Un inmueble que la ex pareja de Micky Molina compró hace años y que convirtió en su apartamento de soltera. Después del divorcio, Lydia reclamó ya ese piso, de su propiedad, y por cuya utilización Alberto, de forma simbólica, le pagaba un alquiler de casi doscientos euros. Un apartamento que Martín se niega a desalojar. Así que Bosch lo intenta por lo judicial. La actriz se presentó en los juzgados de la madrileña calle de Ferraz en un paso más por solucionar el problema. En cambio, su ex ni apareció por allí. Total, era un encuentro más de tantos que tienen en los juzgados de Madrid. Cómo no están saturados… Cuando Lydia abandonó la casa porque le tocaba ocuparla a Alberto, se llevó todos los muebles de la vivienda. Alegaba que eran suyos. Así que Martin tuvo que presentar una demanda por haber dejado la vivienda en condiciones casi inhabitables. Una historia que parece que va a mantenerse eternamente entre demanda y demanda. Además del tiempo libre que deben de detener para idear todas estas artimañas, del dinero destinado a poner en marcha la maquinaria judicial española, Alberto y Lydia deberían sentarse a pensar qué imagen están dándole a sus hijos y que pensarán los pequeños cuando, el día de mañana, sean conscientes de lo que han vividos sus padres.