Las 57 hectáreas afectadas por la Balsa del Sapo estarán exentas de pagar eI IBI rústico

LAEDICION.NET.-:/ Redacción Twitter @LaEdicin.-El Ayuntamiento de El Ejido ya ha finalizado los informes técnicos que permitirán la devolución del importe íntegro del Impuesto sobre Bienes Inmuebles Rústicos correspondiente a 2011 a los propietarios de las fincas en producción que se hayan visto afectadas por inundaciones en la Balsa del Sapo, que tampoco tendrán que hacer frente al pago del IBI de 2012. De esta manera, serán un total de 57 hectáreas las que estarán exentas del pago de este impuesto, lo que supondrá al Consistorio dejar de ingresar 31.000 euros por la recaudación de este tributo municipal. Según ha explicado el concejal de Agricultura del Ayuntamiento de El Ejido, Manuel Gómez Galera, “ayer mismo finalizaron las visitas de los técnicos municipales a las fincas dañadas para comprobar que éstas se encuentran totalmente improductivas y así poder proceder a la devolución íntegra el IBI de 2011 a los propietarios que ya hayan hecho frente a los pagos y mantener la exención del impuesto correspondiente a este año, tal y como se acordó con la Asociación Cañada de Las Norias el pasado mes de enero”. El edil ha concretado que se han realizado los informes de daños en las fincas perjudicadas, “cuyas pérdidas económicas durante las campañas 2009 y 2010 ascendieron a más de 2,5 millones de euros, según los datos presentados por la Asociación Cañada de Las Norias”. Esta medida viene a dar cumplimiento a los compromisos electorales que el equipo de gobierno adquirió con los afectados de la Balsa del Sapo. En este sentido, el edil ha insistido en que este asunto “siempre ha sido una prioridad máxima para este equipo de gobierno, puesto que supone un problema de mucha gravedad, con el riesgo que conlleva el creciente aumento del nivel del agua del humedal para la población de Las Norias”. En este sentido, Gómez Galera ha insistido en recordar la necesidad de que se atiendan todas las reivindicaciones ya planteadas tanto por el equipo de gobierno como por los afectados, “entre las que ha pedido que se tengan en cuenta los daños sufridos en las fincas anegadas, de forma que pueda haber algún tipo de compensación e indemnización, así como que se pongan en marcha líneas de ayudas para la reconstrucción y rehabilitación de las infraestructuras dañadas y para el arreglo de los caminos afectados en las inmediaciones del humedal” ha detallado. El concejal de Agricultura ha remarcado que “desde la administración local se está cumpliendo con los compromisos que hemos adquirido con los agricultores perjudicados, sin embargo desde la Consejería de Medio Ambiente todavía, y a pesar de la gravedad de la situación, no se ha dado una fecha para el comienzo de las obras para el bombeo adicional”, ha explicado el responsable municipal. Reunión con la Subdelegación del Gobierno El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha valorado muy positivamente la reunión mantenida hoy en la subdelegación del Gobierno en la que se han analizado las distintas alternativas para dar una solución definitiva al problema de la Balsa del Sapo, “cuya situación actual es de una gravedad extrema”, ha apuntillado. Góngora ha señalado que “apostamos por una solución, que es la más ambiciosa, que solucionaría de una forma estructural y definitiva, incluso frente a posibles avenidas e inundaciones, el problema de la Balsa del Sapo y, además, daría una solución al núcleo de Las Norias con la rambla de Carcáuz, que también aporta agua a la balsa, protegiéndola frente a posibles inundaciones”. El primer edil ha insistido en que se trata de dos actuaciones muy necesarias, al tiempo que ha destacado que “es muy urgente y no es óbice el que tratemos de agilizar al máximo este proyecto para que la Junta de Andalucía ponga en marcha el bombeo de emergencia que debería estar funcionando desde el mes de marzo si se hubieran cumplido los plazos a los cuales se comprometió la delegada de Medio Ambiente”. De igual modo, Góngora ha querido pedir nuevamente a la Consejería de Medio Ambiente que agilice al máximo la adjudicación del proyecto de bombeo adicional, así como que dé una fecha definitiva de inicio de las obras de la primera y segunda fase, de forma que permita bajar los niveles de cara al invierno del año próximo. Para el regidor ejidense se trata de cumplir un doble objetivo con dos soluciones necesarias y urgentes, “una estructural y definitiva y otra que tiene que ser inmediata para poder bajar por lo menos tres metros esa lámina de agua”.