La Guardia Civil investiga la venta de coches de ocasión desde 2011

Más de 200 vehículos precintados a la espera de analizar sus cuentakilómetros

LAEDICION.NET.-La Guardia Civil mantiene abierta la operación contra  un presunto fraude masivo en la venta de vehículos de ocasión en la provincia de Almería, cuyas ramificaciones se extienden fundamentalmente en localidades del Poniente. La investigación adelantada este martes por La Voz de Almería está coordinada por la Policía Judicial de El Ejido y el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número Dos de Berja, que ya tomó declaración a cuatro detenidos el pasado sábado.
La trama está acusada de estafar a cientos de compradores en la provincia con la manipulación de los cuentakilómetros de vehículos con rodajes muy elevados (algunos superiores a los 200.000 kilómetros). De este modo, los vendedores habrían conseguido inflar el precio de salida en el mercado y obtenido enormes beneficios económicos.

Los detenidos pasaron a disposición del juzgado el pasado sábado, según confirmó el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). Sin embargo, la operación trasciende de las gestiones realizadas durante el mes de junio. Según fuentes jurídicas, la Guardia Civil sospecha de una venta fraudulenta de automóviles de segunda mano desde, al menos, el año 2011.
Precintos Las primeras pesquisas se concentraron en un establecimiento del municipio de Berja. La Policía Judicial abrió diligencias sobre las actividades de una empresa familiar y el juzgado virgitano coordinó las autorizaciones correspondientes.

Sin embargo, las implicaciones de la macrooperación de la Benemérita van mucho más allá y han provocado la inmovilización de más de 200 vehículos en tiendas de Almería, Huércal de Almería y varios municipios del Poniente, fundamentalmente. Son turismos bajo sospecha, todavía sin vender, precintados de forma preventiva a la espera de analizar si se trucaron sus cuentakilómetros para adelgazar sus rodajes en carretera y elevar así el precio de comercialización.

Las primeras previsiones apuntan a un fraude con cientos de afectados en la provincia. La Guardia Civil sitúa en el centro de la operación a un joven residente en Roquetas de Mar que, de algún modo, sería nexo de unión entre los locales investigados. El imputado (no ha trascendido su identidad) declaró ante la juez instructora y negó su participación en los hechos, aunque reconoció haber realizado reparaciones.

Los agentes encontraron en un almacén en Roquetas de Mar abundante material electrónico e informático para acceder supuestamente a las centralitas de los vehículos, sortear los cortafuegos colocados por las marcas constructoras y modificar las cifras de los contadores. El sistema es muy sofisticado y la detección de los cambios inabordable.
Maquillaje Los turismos tenían pocos años de vida y procedían en gran parte de los casos de subastas o de sistemas de alquiler en leasing. Luego eran ‘maquillados’ y ofertados a precios muy competitivos. El resultado eran coches con ‘poca carretera’ que daban problemas mecánicos inesperados por los compradores, seguros de adquirir motores con sólo 50.000 kilómetros, por ejemplo, cuando en realidad acumulaban más de 200.000.

La Comandancia de la Guardia Civil de Almería ratificó la existencia de cuatro detenidos, aunque se muestra prudente sobre los datos de una operación cuya fase de análisis documental puede engordar la nómina de imputados en las próximas semanas. De momento, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número Dos de Berja decretó libertad con cargos (sin necesidad de fianza) para los cuatro acusados de estafa, a los que ha retirado el pasaporte.