desarticulada una red que introducía estupefacientes mediante “correos” humanos

SIMULABAN EMBARAZOS PARA PORTAR LA DROGA
Una de las “mulas” falleció al romperse los envoltorios con droga que transportaba en su estómago

LAEDICION.NET.-REDACCION.-Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una red que introducía cocaína y otros estupefacientes mediante “correos” humanos, que eran captados entre personas con escasos recursos económicos. Les ofrecían cantidades que oscilaban entre los 1.500 y los 3.000 euros en función del tipo de droga y de su valor en el mercado ilícito. Las investigaciones se han saldado con la detención de 14 personas en nuestro país (12 en Córdoba, 1 en Madrid y 1 en Almería) y otras ocho en el extranjero gracias a la cooperación policial internacional.

En el transcurso de las actuaciones se han intervenido un total de 17 kilos de cocaína y 15 de hachís en nuestro país, así como otros 7 kilos de cocaína y 500 gramos de heroína, que han sido interceptados en el extranjero. Transportaban la droga oculta en dobles fondos, mediante paquetería, ingerida, adosada en el cuerpo o simulando embarazos. Una de las “mulas” falleció al romperse uno los envoltorios que transportaba en su estómago.

La banda explotaba y estudiaba diferentes rutas y formas de traficar con los distintos tipos de estupefacientes por toda Europa. De este modo pretendían dificultar la acción policial y judicial. La vía que más empleaban era la aérea, desde Sudamérica hasta nuestro país. En otras ocasiones, la droga se recibía en el continente africano y desde allí se trasladaba a España por vía terrestre o marítima. El destino final del estupefaciente era España o bien otros países europeos, como Holanda o Suiza, donde también contaban con infraestructura.

Las primeras actuaciones contra esta red se realizaron en la localidad cordobesa de Lucena, donde habían captado a varias personas como “correos”. Además, se pudo averiguar que estaba dirigida principalmente por ciudadanos de origen nigeriano que disponían de los contactos necesarios para comprar la droga así como de medios económicos e infraestructura suficiente para su posterior distribución.

¿La droga o la vida?

Los arrestados se caracterizaban por su falta de escrúpulos a la hora de captar los “correos”, casi siempre españoles, aprovechando su precaria situación económica. Les prometían cantidades de dinero por vuelo realizado que oscilaban entre los 1.500 y los 3.000 euros, dependiendo del tipo y valor de mercado de la droga transportada. Para el traslado de la droga utilizaban maletas con doble fondo, “comida” (ingerida y transportada en el estómago con el grave riesgo que supone para la salud del portador), adosada al cuerpo, simulando embarazos o, incluso, aprovechando dicha situación.

Durante el transcurso de la investigación uno de los “correos”, de nacionalidad nigeriana, resultó muerto como consecuencia de la rotura en el interior de su estómago de varios envoltorios que contenían sustancia estupefaciente, que habían sido deficientemente preparados por la organización. Cuando comenzó a sentirse mal, en vez de trasladarlo al hospital, le obligaron a ingerir grandes cantidades de café con sal para provocar la expulsión de las “bellotas” de droga.

En la investigación han participado agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central, adscrita a la Comisaría General de Policía Judicial; de la Comisaría Provincial de Córdoba; de la Brigada Provincial de Almería; y de la Comisaría Local de Lucena (Córdoba).
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