EXCLUSIVA
Así lo demuestran las imágenes que obran en poder de este digital
LAEDICION.NET.-REDACCIÓN.-Recibió a su cuñado y le acompañó en todo momento en la explanada de las oficinas en La Moraleja
Dirigió la operación haciendo intercambios continuos con su esposa Blanca Cuesta
Blanca y Borja compraron una vivienda por 500.000 euros a espaldas de la Baronesa que asumió el pago de impuestos a Hacienda
A Borja Thyssen, hijo de Carmen Cervera y Manolo Segura, posteriormente reconocido por el Barón Thyssen, le ha faltado tiempo para emitir un comunicado en el que se auto exculpa de cualquier posible delito y anuncia el inicio de acciones legales contra su madre. Eso sí, con la colaboración inestimable de distintos tertulianos de los programas de corazón. Contrariamente a todas las especulaciones y a las “supuestas” informaciones que determinados medios de comunicación, sobre todo televisivos, se inventan sobre el affaire entre Carmen Cervera y su hijo Borja, este periódico se encuentra en disposición de asegurar que el vástago de la Baronesa Thyssen contempló y colaboró en el robo del ordenador de su madre.
Extraconfidencial.com, y por ende éste redactor, tienen en su poder copia de la grabación realizada por las cámaras internas ubicadas en la residencia de Tita Thyssen en La Moraleja. Y desde principios de abril pasado, fecha en que ya se remitieron habían copias a diversos órganos ajenos y fecha en que los propios Borja y Blanca intentaban paralizar mediante amenazas, actos coercitivos y otras maniobras que desvelaremos en próximas ediciones. Desde estas páginas nos basamos en documentos fehacientes y no en testimonios de alguien que, sin identificar, asegura haberlas visionado.
Las imágenes cantan
Las imágenes son idénticas a las que obran en poder del Juzgado número 2 de Alcobendas, del ministerio del Interior y, desde luego, coincidentes con las de la propia empresa de Seguridad que paga a los guardaespaldas. Y con ese respaldo documental podemos asegurar y demostrar que:
- Borja Thyssen fue el principal inductor y participante en el expolio de la CPU principal, ya que él acompañaba a su esposa y los guardaespaldas en el momento de los actos y fue quien franqueo la entrada de sus “compinches” a las dependencias familiares.
- Borja Thyssen, siempre dirigió la operación haciendo intercambios continuos con su esposa Blanca Cuesta.
- Borja Thyssen, recibió a su cuñado y le acompañó en todo momento en la explanada de las oficinas en La Moraleja. Aunque la casa de invitados se encuentra en el mismo edificio, ésta construida en un nivel superior y el acceso único es por la parte trasera.
a costa de la madre
Otros datos que pueden ser de su interés. La denuncia se realiza en el mes de octubre y las primeras diligencias realizadas por el juez de Alcobendas, corresponden a la declaración de los guardaespaldas. En ellas, a pesar del secreto sumarial, hemos podido comprobar que Juan y Freddy, reconocen los hechos reflejados en la grabación y amplían que la copia se hizo con la ayuda del abogado de los B&B… ¿Entienden ahora la imputación de los tres?
Ante ésta confesión, los abogados de Tita Cervera han retirado la denuncia contra los miembros de seguridad. Entienden que actuaron por ordenes de Borja y Blanca y como empleados, hacer lo contrario significaría el paro.
Hacienda, tras el rastro
Se habla mucho de la enemistad de la Baronesa con su nuera Blanca Cuesta. Motivos tiene. Como muestra un botón:
21 de Marzo 2003. Relación incipiente entre Borja -¿Segura Cervera? O ¿Thyssen Cervera?, ¡Qué galimatías!-, con Blanca Cuesta. Ella compra una vivienda, casa número tres del cuarto bloque integrante de la Primera Fase del Conjunto Residencial Candell y Las Peñas en Santa Feliu de Guixols. El inmueble consta de piso, buhardilla, garaje y todo lo que exige una vivienda para la nuera de una Baronesa. Lo grave de la operación y causa de las primeras fricciones entre Carmen y Blanca es que el pago lo realiza Borja a través de la sociedad de la familia Thyssen XALUPA DE L´EMPORDA S.L., lo cual generó un riesgo importante para la Baronesa.
Y sobre todo a su “gestor”, el abogado de la Fundación Thyssen, Jaime Rotondo, que firmó los pagos del piso pensando que la operación tenía el visto bueno de Tita. Y lo que es peor, las multas y los impuestos que debieron pagar a la Hacienda Pública para aclarar una operación cercana al medio millón de euros.
Si la primera fue en la frente, imagínense el resto. No imaginen, en próximas ediciones les ampliaremos información sobre otras operaciones del matrimonio B&B.
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