La teniente de alcalde de Gádor acusa al delegado de Educación de “marginar” a los alumnos del CEIP Soledad Alonso de Drysdale

El Consistorio lleva solicitando desde el año 2005 la reparación de este centro educativo, que tiene más de 50 años de antigüedad

“Almansa no exige a su partido lo que exige al equipo de Gobierno del PP. Para él los escolares no son una prioridad, ya que, a diferencia de nosotros, él no se ha plantado frente al delegado para exigirle estas necesarias reformas”

LAEDICION.NET.-REDACCIÓN.-El equipo de Gobierno de Gádor no piensa quedarse callado ante la “lamentable” situación del CEIP ‘Soledad Alonso de Drysdale’ de la Villa de Gádor. Por este motivo, la teniente de alcalde del Ayuntamiento gadorense, Lourdes Ramos, ha arremetido esta mañana contra el delegado de Educación de la Junta de Andalucía, Francisco Maldonado, por la “pasividad” que está demostrando ante las necesidades educativas de este municipio del Bajo Andarax. Ramos ha acusado de “marginar” a los escolares gadorenses al no atender a sus demandas. Y es que, el Consistorio lleva más de cuatro años exigiendo, por activa y por pasiva, al Gobierno andaluz que acometa una reforma integral de este colegio, que tiene una antigüedad superior a 50 años con las consecuentes deficiencias en materia de estructura, instalaciones eléctricas, fontanería, climatización, etcétera, que esto conlleva. “La delegación está ignorando y despreciando a los estudiantes de Gádor. Francisco Maldonado conoce de primera mano cuál es el estado del colegio, puesto que lo ha visitado en varias ocasiones”, apostilla Lourdes Ramos.

La teniente de alcalde lo tiene claro. “No podemos permitir que los escolares tengan que estudiar en un colegio que cuenta con unas carpinterías de hierro y madera que hacen que las clases estén heladas en invierno y nada aisladas térmicamente. El colegio necesita una rehabilitación y sustitución de las cubiertas y las solerías, que presentan un estado lamentable que está produciendo humedades. Los alumnos tampoco saben aún lo que significa accesibilidad, puesto que aún no se ha eliminado ninguna barrera arquitectónica. Todo ello sin contar con el aseo que se comprometió arreglar con el Ayuntamiento de Gádor. Nosotros cumplimos con nuestra parte del trato, el delegado no. Nosotros estamos haciendo todos los años unas labores de mantenimiento, la Junta debería de cumplir con sus obligaciones y mejorar las instalaciones”, explica Ramos.

El punto de partida de esta polémica se remonta al 22 de septiembre de 2005, cuando el equipo de Gobierno inició los trámites de solicitud de rehabilitación general de este centro educativo. “Aprobamos por unanimidad la solicitud a la Junta de la inclusión de nuestro colegio dentro del Plan Mejor Escuela, ya que cumplía todos los requisitos”, explica la edil.

Casi un año más tarde, el 6 de julio de 2006 el pleno volvió a hacer la misma solicitud a la Delegación de Educación. Esta petición era clara. “Nosotros solicitamos que ellos realizaran una serie de obras y, a cambio, nos comprometíamos a reparar los aseos del comedor, pintar el patio, siete aulas, el pasillo, el despacho del director, sustituir el timbre, dotar de un pulsador a la fuente y mantener la carpintería, albañilería y fontanería. Una vez más, hicieron caso omiso de nuestra propuesta”, explica la teniente de alcalde, que recuerda que el pleno volvió a hacer la misma solicitud el 6 de octubre de 2008 sin que, aún, se hayan pronunciado al respecto.

Pero el esfuerzo del equipo de Gobierno no quedó ahí. El alcalde, Eugenio Gonzálvez, ha informado por escrito en diversas ocasiones de la imperiosa necesidad que existe en el ‘Soledad Alonso de Drysdale’ de acometer una reforma integral, llegando incluso a reunirse en dos ocasiones con el responsable provincial. “El alcalde entregó en mano en la Delegación el primer escrito el 27 de septiembre de 2009 y remitió un segundo en septiembre de 2009. ¿Les han contestado a ustedes? A nosotros no”, ironiza Ramos.

Por todo ello, desde el Ayuntamiento de Gádor esperan que se atienda a sus demandas, al igual que se está haciendo desde otros organismos públicos. “No nos vamos a quedar de brazos cruzados. Si hace falta fletaremos autobuses con padres de alumnos hasta la Delegación de Educación”, asegura.