Muchas especulaciones sobre el divorcio de Doña Elena y Marichalar
LAEDICION.NET.-REDACCIÓN.-
La Infanta Elena y Jaime de Marichalar podrían haber iniciado los trámites para divorciarse definitivamente, como ya se hizo eco El Semanal Digital. Hace dos años anunciaron el "cese temporal de la convivencia" tras 14 años de matrimonio y ahora los rumores apuntan a que no ha habido posibilidad de reconciliación entre ambos y a que su unión ha llegado al punto final.
La noticia ha saltado después de que el miércoles, la periodista Mariángel Alcázar asegurara en la revista Lecturas que tras estos dos años de reflexión, los duques de Lugo han decidido poner en marcha los trámites del divorcio.
Sin embargo, otros periodistas, como es el caso de Jaime Peñafiel, opinan que es pronto para hablar de divorcio entre la Infanta Elena y Jaime de Marichalar. "Todavía no. No están en trámites todavía, no es cierto", ha dicho Peñafiel.
Según Alcázar, los duques de Lugo no se habían divorciado antes puesto que querían dar un tiempo a sus hijos, Felipe Froilán y Victoria Federica, para que "fueran asimilando la nueva situación familiar", pero consideran que ya ha llegado el momento de dar el paso.
Quien no ha querido pronunciarse sobre el tema ha sido Beatriz de Orleans, amiga de Jaime de Marichalar. Ésta acudió a la VIII entrega de los premios internacionales de Periodismo de El Mundo, donde se le preguntó por la situación del duque de Lugo. "Hace mucho que no le veo y además como es cosa de la familia nunca hacemos comentarios", declaró la aristócrata.
También hay quien asegura que Jaime de Marichalar está echando un pulso a la Casa Real, puesto que no quiere renunciar al título. "Jaime no exige seguir siendo duque de Lugo ni está pidiendo otros honores nobiliarios a cambio del divorcio. Esos comentarios nos duelen porque son falsos", comentaban personas de su entorno a La otra crónica.
El propio Marichalar negaba con rotundidad estas especulaciones. "No lucho por tener ese título ni ningún otro, no hay nada que negociar. Yo tengo un apellido del que estoy muy orgulloso, no necesito más".
Desde que anunciaran el "cese de la convivencia" en noviembre de 2007, el matrimonio ha vivido separado. Jaime de Marichalar permaneció en el domicilio familiar, mientras que Doña Elena se trasladó primero a un piso de alquiler y actualmente vive en un ático de la capital.
Felipe Froilán y Victoria Federica han vivido todo este tiempo con su madre, aunque las visitas a su padre han sido constantes.
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