Por qué dejamos Hortyfruta

DANIELLA MONTENEGRO.-UNA interprofesional es un organismo "constituido por organizaciones representativas de los empresarios de la producción, de la transformación y de la comercialización de un sector o producto incluido dentro del sistema agroalimentario" así aparece la definición de lo que es una Interprofesional, que además tiene establecidos una serie de objetivos determinados y que van encaminados a la promoción, imagen, información, estudios, investigación, creación de normas de calidad, entre otras. En principio, este tipo de organizaciones pretenden ser una herramienta para mejorar determinados sectores; sin embargo, sus movimientos se ven limitados cuando hay que regular mercados, gestionar crisis o articular instrumentos que mejoren la rentabilidad ante los actores representados.

Desde siempre, el sector agrario, empujado por las organizaciones agrarias como Asaja han apostado por el establecimiento de mesas interprofesionales o intersectoriales en las que estuvieran representados todos los miembros que operan en el sector para debatir y proponer soluciones que beneficien a todos y evitando que se perjudique siempre al más débil. Como organización agraria es nuestra misión y objetivo defender al agricultor y sus intereses, respetando los intereses de los demás pero sin permitir abusos y pisoteos, es ahí donde hemos comprobado la amargura de la impotencia por ver cómo nuestra Interprofesional no ha cumplido con las expectativas que su nacimiento había generado.

En el caso de Hortyfruta, no se puede reprochar a Asaja que durante estos años no haya arropado y apoyado a esta institución, y es más, hemos sido los representantes de los productores los que más hemos creído y apostado por ella. Precisamente ha sido estos los que nos han reclamado que solicitáramos nuestra baja, ya que tras cuatro años no se ha conseguido mejorar la rentabilidad del sector, el precio de los productos, hacer una gestión de mercado óptima o entablar conversaciones entre los eslabones de la cadena para evitar márgenes abusivos que perjudican a productores y consumidores.

Nadie puede cuestionar que el trabajo realizado desde Asaja por aportar ideas y propuestas y es en el propio seno de la Interprofesional donde hemos manifestado nuestras inquietudes y hemos defendido los intereses de los agricultores. Contrariamente, nos hemos encontrado en el colegio comercializador con un muro que ha impedido conocer los mercados o incluso poder hablar con empresas en momentos de crisis de precios como los que ahora estamos padeciendo. Lejos de ser una mesa de interlocución nos hemos topado con el dominio total y absoluto del colegio que no ha permitido ahondar en los problemas del comercio, los verdaderos escollos del sector, y por eso seguimos preguntándonos ¿cuál es su posicionamiento ante la actual crisis de precios y qué soluciones proponen desde su asociación para mejorar la rentabilidad de los productores y garantizar la viabilidad de las empresas hortofrutícolas?

Desde Asaja hemos querido denunciar las limitaciones que como otras Interprofesionales también tiene Hortyfruta y provocar un debate en torno a esa figura que desemboque en un cambio de legislación que permita abordar todas las reivindicaciones de los agricultores en materia de precios.

Sin Asaja ni Coag Hortyfruta deja de tener sentido. Así las cosas y de no cambiar nada, Hortyfruta corre el riesgo de quedar como juguete de la Administración pero sin operatividad ni representatividad, como un muro infranqueable para abordar las grandes cuestiones del sector por una sencilla razón: la falta de mecanismos para hacer una buena gestión y la forma tan particular que tiene de entender esta gestión de algunos de sus miembros. Lejos de intentar el descrédito de los productores por haber abandonado la Interprofesional lo que procede es llevar a cabo una reflexión interna y analizar los motivos por los que nos hemos visto obligados a marcharnos.