La vidente del caso Marta del Castillo ha sido entrevistada en Antena 3TV

Reporteros del programa de Antena 3 Televisión, 'Equipo de investigación', que se emite en las noches de los viernes, visitó recientemente Roquetas de Mar para entrevistar a Mariví Fernández, la vidente que colabora con la policía sevillana para intentar localizar el cuerpo sin vida de la joven Marta del Castillo.

LAEDICION.NET.-: DANIELLA MONTENEGRO. @LaEdicin.- La cadena de televisión nacional decidió visitar Roquetas después de hacerse eco del reportaje que Diario de Almería publicó en el que Mariví relataba las relaciones que mantenía con los investigadores hispalenses en este trágico caso. “Me han dicho que el programa se iba a emitir dentro de unos quince días. Estuvieron preguntándome sobre mis relaciones con la policía sevillana y las señales que les había dado. Incluso les mostré los correos electrónicos que he intercambiado con los agentes de alli. Pero sigo diciendo lo mismo, me parece que hasta que yo no vaya allí en persona, no van a encontrar el cuerpo. Porque un policía puede estar encima del cadáver enterrado y no darse cuenta que está ahí. Hay que sentirlo. En cuanto tenga dinero me voy a Sevilla para buscar el cuerpo de esta pobre chica”, asegura Mariví Fernández, que tiene un gabinete en el centro de la ciudad. Ella añade que “les pedí que no emitieran nada sin la autorización antes de los padres de Marta, porque se trata de un caso en el que hay mucho dolor y si me equivoco en el sitio no quiero causar más daño a la familia”. Desde hace meses Mariví afirmaba que tenía muchas visiones sobre el lugar donde se había enterrado el cuerpo de esta joven tras ser asesinada. Mariví habló con los agentes hispalenses dándoles a conocer un lugar muy específico donde ella veía que descansaba la infortunada víctima. Pocos días después la Policía Nacional llamaba a su móvil para confirmarle que efectivamente el lugar que ella decía existía realmente, pese a no haber estado nunca en la zona, por lo que durante varias semanas han estado en contacto para que Mariví les ofreciera datos más concretos donde buscar. La roquetera afirmaba que “todo se debió a una huija que hicieron los niños y que acabó en tragedia. Se les apareció un dios satánico sediento de sangre que les exigió un sacrificio. Todo lo hicieron inconscientes, por eso ellos no saben el lugar donde está enterrada Marta. Pero cuando le encuentren alguno de los chavales no va a poder soportar la realidad del crimen que cometieron”, afirma la vidente, quien asegura que la policía no acaba de dar con el lugar exacto “y voy a tener que irme yo personalmente a Sevilla cuando pueda y hablar con los padres”, asegura. Esta vidente, que nació en Ciudad Real, aunque ha vivido muchos años en Extremadura, está casada, tiene tres hijos, y relata que “desde pequeña ya veía cosas que otros no podían, pero no le daba importancia. Por ejemplo iba andando por la calle y de repente le preguntaba a una mujer por qué le dolían tanto los riñones, y la señora sorprendida me preguntaba cómo sabía que le dolían los riñones. Pero a los 18 años ya empecé a ver cosas más serias, incluso personas fallecidas, sin yo quererlo. Una señora me dijo que su marido había muerto y de repente apareció el marido a su lado claramente como si estuviera vivo. Le dije los rasgos de su marido y era él”, relata. También es especialista en huijas, unas experiencias que no recomienda a nadie “porque aquí la gente es muy dada a hacerlas y cuando llegan los momentos serios no saben qué hacer y tienen que llamarme para salir de donde se han metido. Cuando aparezco se para todo de repente, los muebles dejan de moverse y las voces se van, es una emergía innata que no sé de dónde procede”, afirma Mariví, quien asegura que no tiene antecedentes familiares de personas con poderes, excepto “una tía muy lejana que al desenterrarla cuentan que estaba integra e incorrupta, le encontraron tal y como murió”. Se encuentra en Roquetas debido a que le recomendaron que buscara un buen clima tras un accidente laboral que sufrió su marido, quien perdió un pie que después fue injertado. “En la clínica López Ibor de Madrid querían amputarle la pierna como única solución pero yo me negué. Me quedé tres noches con él y ahora incluso puede caminar. Los médicos dijeron que era increíble”, recuerda con orgullo.