LAEDICION.NET.-REDACCIÓN.-La instalará el Ayuntamiento
dentro del Plan Urban El sistema medirá la calidad del aire al objeto de
adoptar las medidas oportunas Los monumentos de piedra pueden parecer
conceptualmente indestructibles, si bien la experiencia ha demostrado su
debilidad frente a la constante agresión de los agentes de polución. Esta
realidad ha motivado al Ayuntamiento de Almería a instalar este año una
estación de control de la calidad del aire en aras de obtener información
puntual sobre los niveles de contaminación ambiental y proteger, en la medida
de lo posible, la Alcazaba de un envejecimiento acelerado que pudiera hacer
peligrar su estado de salud.
La iniciativa municipal está contemplada dentro de las actuaciones que a lo largo del presente ejercicio pretende acometer la empresa municipal Almería Urban, encargada de gestionar los fondos europeos destinados a la recuperación del casco viejo de la capital. La empresa municipal dispone de una partida económica reservada ya para la adquisición de este sistema de control de 50.000 euros. "Es una pequeña estación la que queremos poner en funcionamiento, porque las grandes centrales pueden llegar a costar mucho dinero", desgrana el gerente de Almería Urban, Manuel Maldonado.
Según ha explicado, la intencionalidad del Ayuntamiento es la obtención de información muy puntual sobre la calidad del aire que pueda servirle de utilidad a la Junta de Andalucía a la hora de adoptar medidas protectoras y correctoras. La instalación de esta estación no es en realidad una competencia municipal, si bien el Gobierno local atiende a la valía de la Alcazaba como principal monumento de la provincia y al interés de la Unión Europea en este tipo de acciones medioambientales y energéticas, que aporta, a través de los Fondos Feder, el 70% de los 14 millones de euros que sustentan el Plan Urban. "Nuestro principal monumento es de piedra y se encuentra a la intemperie por lo que la climatología le afecta, desde la lluvia, la humedad o el viento hasta la acumulación de polvo", comenta Maldonado.
Informes especializados atribuyen el decaimiento acelerado de los monumentos arquitectónicos en piedra en las décadas de los 70 y 80 al incremento de los agentes de polución en el aire, un impacto dramático cuando se tienen cantidades significativas de calcita (CaCO3), como por ejemplo en mármoles, areniscas y aún en los morteros. Incluso el cemento está siendo agredido por los agentes de polución.
La estación será instalada sobre el edificio previsto en las cuevas del Mesón Gitano, que será recuperado mediante las obras a iniciar en Semana Santa. Su radio de acción dependerá del sistema que contrate Almería Urban, si bien en principio está pensado para la Alcazaba, ya que otros edificios históricos, como pudiera ser la Catedral, se encuentran más protegidos al estar rodeados de edificaciones.
Además de la transformación del Mesón Gitano, Almería Urban tiene por delante este año intervenciones de relevancia destinadas a mejorar el entorno del conjunto monumental como es la urbanización del acceso a la Alcazaba. El presupuesto con el que cuenta inicialmente Almería Urban para el desarrollo de sus iniciativas roza los cuatro millones de euros, si bien la cantidad podría elevarse al sumar los remanentes resultantes de la liquidación del pasado ejercicio, que está siendo cerrada ahora por la empresa municipal.
La iniciativa municipal está contemplada dentro de las actuaciones que a lo largo del presente ejercicio pretende acometer la empresa municipal Almería Urban, encargada de gestionar los fondos europeos destinados a la recuperación del casco viejo de la capital. La empresa municipal dispone de una partida económica reservada ya para la adquisición de este sistema de control de 50.000 euros. "Es una pequeña estación la que queremos poner en funcionamiento, porque las grandes centrales pueden llegar a costar mucho dinero", desgrana el gerente de Almería Urban, Manuel Maldonado.
Según ha explicado, la intencionalidad del Ayuntamiento es la obtención de información muy puntual sobre la calidad del aire que pueda servirle de utilidad a la Junta de Andalucía a la hora de adoptar medidas protectoras y correctoras. La instalación de esta estación no es en realidad una competencia municipal, si bien el Gobierno local atiende a la valía de la Alcazaba como principal monumento de la provincia y al interés de la Unión Europea en este tipo de acciones medioambientales y energéticas, que aporta, a través de los Fondos Feder, el 70% de los 14 millones de euros que sustentan el Plan Urban. "Nuestro principal monumento es de piedra y se encuentra a la intemperie por lo que la climatología le afecta, desde la lluvia, la humedad o el viento hasta la acumulación de polvo", comenta Maldonado.
Informes especializados atribuyen el decaimiento acelerado de los monumentos arquitectónicos en piedra en las décadas de los 70 y 80 al incremento de los agentes de polución en el aire, un impacto dramático cuando se tienen cantidades significativas de calcita (CaCO3), como por ejemplo en mármoles, areniscas y aún en los morteros. Incluso el cemento está siendo agredido por los agentes de polución.
La estación será instalada sobre el edificio previsto en las cuevas del Mesón Gitano, que será recuperado mediante las obras a iniciar en Semana Santa. Su radio de acción dependerá del sistema que contrate Almería Urban, si bien en principio está pensado para la Alcazaba, ya que otros edificios históricos, como pudiera ser la Catedral, se encuentran más protegidos al estar rodeados de edificaciones.
Además de la transformación del Mesón Gitano, Almería Urban tiene por delante este año intervenciones de relevancia destinadas a mejorar el entorno del conjunto monumental como es la urbanización del acceso a la Alcazaba. El presupuesto con el que cuenta inicialmente Almería Urban para el desarrollo de sus iniciativas roza los cuatro millones de euros, si bien la cantidad podría elevarse al sumar los remanentes resultantes de la liquidación del pasado ejercicio, que está siendo cerrada ahora por la empresa municipal.
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