La Inspección de Trabajo multa a dos subcontratas de Elsur con 30.000 euros

Su informe dice que Maviroad y Arborimar "son un proceso de metástasis en el que se promocionan unas empresas que pueden calificarse como de usar y tirar", "sin actividad conocida fuera de Elsur"

REDACCIÓN.-La Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social han multado a dos empresas subcontratas de Elsur con 30.000 euros por lo que entiende que es una falta "muy grave" y aprecia "circunstancia agravante el número de trabajadores afectados" que es toda la plantilla de ambas sociedades, en concreto 48 en Arborimar y 38 en Maviroad. El informe al que ha tenido acceso esta redacción reconoce el entramado de empresas formado en el municipio de El Ejido, ya que ambas subcontratas "no desarrollan desde su creación más actividad que la contratada por Elsur. No se explica la incesante contratación con las distintas empresas del grupo la resolución anticipada por mutuo acuerdo de la mayor parte de los contratos de las restantes empresas de ese grupo, algo que desde el punto de vista de Elsur y de la racionalidad y simplificación gestora carece de sentido".

Además, el informe que fue adelantado ayer por Onda Cero, asegura que las dos subcontratas "a pesar de contar con en torno a medio centenar de trabajadores cada una de ellas, dispone de estructura organizativa que les permita operar en el marco competitivo del libre mercado; ni siquiera cuentan con personal directivo alguno más allá del órgano de administración" y no cuentan con "capacidad de contratar , porque la mayor parte de los trabajadores reciben directamente las órdenes de trabajo de Elsur".

El documento continúa en sus fundamentos jurídicos con que "ninguna de las subcontratas aporta maquinaria, vehículos e incluso de los útiles que son imprescindibles para el desempeño de su actividad productiva, especialmente necesarios en el caso de los medios de transporte. Los trabajadores utilizaban para sus desplazamientos los vehículos de Elsur y las herramientas que esta empresa les proporciona".

La conclusión más seria en contra de los intereses de El sur y que, con toda probabilidad será determinante en una posible actuación de la Fiscalía en un breve espacio de tiempo, constituye el punto f de dichos fundamentos jurídicos, cuando la Inspección de Trabajo asegura que "Maviroad y Arborimar constituyen hasta ahora el último eslabón de un proceso de metástasis empresarial, en el que se promocionan unas empresas que pueden calificarse de usar y tirar, porque la promoción de estas últimas ha ido acompañado del cese de actividad conocida por parte de las anteriores, que dejaron de tener trabajadores, muchos de los cuales fueron traspasados a las nuevas".

En este mismo sentido, "su único cliente Elsur ha facilitado los principales medios de producción a cambio de un precio sumamente ventajoso y excepcional en el marco de un mercado libre y altamente competitivo, sin contar con una estructura organizativa y de medios que les permitan operar como empresas reales en el mercado". Así contaban con "el capital mínimo de constitución, no realizaban inversiones y carecían del mínimo riesgo empresarial para alcanzar un beneficio desproporcionado de en torno al 80% sobre el canon pactado tras la renovación de los contratos".