Tras esta sanción simbólica, el Consistorio se enfrenta ahora a una reclamación de un millón LAEDICION.NET.-REDACCIÓN.-
El alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, ha sido condenado por los tribunales a pagar de su propio bolsillo una sanción económica de 150 euros a consecuencia de la demora del Ayuntamiento de Almería a abonar obras ejecutadas en uno de los bloques de viviendas de El Tagarete, según desveló ayer el concejal de Urbanismo, Juan Megino.
La multa fue impuesta hace dos años, pero ahora el Consistorio se enfrenta a otra posible reclamación ante la Justicia por valor de un millón de euros.
La historia es bien larga. Se remonta al convenio que en 1997 firmaron el Gobierno central, la Junta de Andalucía, el Consistorio capitalino y la Diputación provincial para la rehabilitación de los 22 bloques de El Tagarete, en los que habían aparecido grietas. Las administraciones firmantes se repartieron la cuantía de la inversión que, entonces, no superaba los 2,5 millones de euros.
Sin embargo, aparecieron complicaciones que obligaron a hacer modificados del proyecto, que lo encarecieron hasta superar los cuatro millones de euros. Estos modificados fueron aprobados durante la Corporación de Santiago Martínez Cabrejas, pero la empresa adjudicataria, Escisa, tiene pendiente de recibir aún un millón de euros.
El Ayuntamiento ha buscado del Gobierno aportación económica para hacer frente al adeudo, obteniendo por respuesta una negativa al considerar la Subdelegación que sus deberes están cumplidos. Según el concejal de Urbanismo, Juan Megino, porque el anterior delegado de Obras Públicas, Francisco Espinosa, no tramitó la modificación del convenio, pero existe "obligación moral".
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