ARCHIVÓ LA DENUNCIA Canalda marca la diferencia entre la Esteban y los niños de la Lotería

LAEDICION.NET.- REDACCIÓN.-Parece que el Defensor del Menor de la Comunidad Madrid, Arturo Canalda, no considera tan grave que los niños del Colegio de San Ildefonso entreguen los premios de la Lotería en televisión, como el que Belén Esteban hable de su hija Andrea en televisión.

De hecho, aunque hace unos meses Canalda envió un escrito a la Fiscalía para que estudiara si había delito penal en la vulneración de derechos de Andrea e instaba a proteger a la menor de su exposición televisiva, ahora ha archivado la denuncia presentada por Organización Impulsora de Discapacitados (OID) contra Loterías y Apuestas del Estado (LAE) por utilizar y exhibir públicamente menores en el Sorteo Extraordinario de Navidad.

La oficina que dirige, Arturo Canalda, tras estudiar la denuncia, entendió que "carece de fundamento", ya que en el Sorteo de Navidad "no se vulnera ningún derecho de los niños", por lo que el Defensor del Menor no realizará ninguna actuación.

En el escrito remitido a Canalda, la OID solicitaba que se informase si, a raíz de la exhibición y publicación de imágenes de los Niños de la Lotería, se ha iniciado o se va a iniciar por parte de esa oficina del gobierno madrileño alguna actuación contra Loterías y Apuestas del Estado, "por la utilización de menores para la celebración de un sorteo público y la posible vulneración de los derechos del niño".

Por su parte, el presidente de la Asociación de Pro Derechos del Niños (Prodeni), José Luis Calvo, consultado sobre esta denuncia, aseguró que no ve "ningún motivo de queja" en que sean niños los que canten los premios del Sorteo de Navidad y afirmó, sin embargo, que habría que "reflexionar más" sobre otras cosas, como el uso de menores en publicidad o programas de televisión.

"Ni al más pintado se le ha ocurrido semejante cosa", subrayó Calvo, quien se mostró "extrañado" de que una asociación se pueda quejar de una tradición que "tiene más de cien años" y, además, "beneficia" a los propios niños, que en algunos casos reciben regalos por cantar los premios en el sorteo.